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La familia del asesinado a puñaladas por su pareja en Lugones se persona en la causa

El abogado de Ana María García, de 28 años y en prisión preventiva, recaba informes para sustentar la defensa en su retraso mental

Los hermanos de Miguel Ángel Suárez "Míchel", el hombre de 52 años asesinado a puñaladas el pasado 17 de julio por su pareja en Lugones, se personarán como acusación particular en el juicio. La mujer, Ana María García, de 28 años, está en prisión preventiva sin fianza desde entonces si bien no confesó la autoría del crimen ante el juez en Siero.

De momento, el juicio no tiene fecha y no se prevé que vaya a fijarse pronto, ya que, según asegura el abogado de la presunta asesina, José Luis Álvarez Niño, del turno de oficio, "el proceso será largo".

Actualmente, el letrado defensor se encuentra recabando informes para conocer el estado mental de la mujer. Por un lado tiene constancia de que padece un retraso mental del 69 por ciento, y su intención es, si no lograr la inimputabilidad de García, rebajar la pena en uno o dos grados. Para ello ha solicitado nuevos informes.

Miguel Ángel Suárez falleció en la noche del 16 al 17 de julio tras recibir 35 puñaladas, supuestamente asestadas por su pareja en el domicilio de Lugones de los padres de ésta, a los que habría confesado lo ocurrido poco después.

Según la autopsia, los hechos tuvieron lugar en torno a la medianoche, aunque la familia de García no llamó a los servicios de emergencia hasta casi tres horas después. Además, en el aviso advirtieron que se trataba de un intento de suicidio.

Esta circunstancia hace sospechar a los investigadores de que la familia tratase de encubrir el asesinato y modificase alguna de las pruebas. De hecho, agentes de la Policía volvieron al piso de los padres de García, en la calle Río Sella de Lugones, para tratar de recabar más pruebas días después del ingreso en prisión de la principal sospechosa.

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