El mexicano Gerardo López Covarrubias disputará la próxima semana en Innsbruck (Austria) el Mundial sub 23 de ciclismo en dos modalidades, la contrarreloj individual y la prueba en línea, y será el corredor más joven de la prueba. El 12 de diciembre cumple 19 años. Lo hará representando a México, pero una buena parte de su hinchada está muy lejos de su país de origen: en Carbayín.
La razón está en que su entrenador es Gustavo Gutiérrez, nacido en Carbayín, que ha logrado que el joven ciclista estableciese un vínculo muy estrecho con la parroquia. Gutiérrez recibió hace tres años la oferta de entrenar a la joven promesa, natural del estado de Zacatecas, y lo invitaban a viajar a México. Pero él no quería dejar su tierra y propuso que fuera el joven el que se trasladase a Asturias. La propuesta cuajó y el ciclista estuvo alojado dos veranos en casa de la abuela de Gustavo, Telvi Montequín, a quien el entrenador atribuye una gran parte del mérito de la progresión del chaval.
Porque su abuela se comprometió extraordinariamente con el joven. "Sin ella, no podría vivir aquí; sabe a la hora que tiene que acostarse y levantarse cuando hay carreras, sabe lo que tiene que hacer en cada momento", y este trato ayuda mucho al corredor.
"Pero no solo ella ha ayudado, también mis padres, mi hermano y mis amigos de Carbayín", señaló. Gracias a esta ayuda, Gerardo López Covarrubias se ha sentido como en casa, un vecino más de la localidad, y eso lo ha ayudado en sus entrenamientos y en su ánimo. Ha sido muy habitual para el entrenador alojar a ciclistas en casa de su abuela, que ya conoce perfectamente su estilo de vida y la alimentación que requieren. Aparte de la calidez con la que los acoge.
Aunque Gustavo Gutiérrez atribuye a las buenas cualidades y la capacidad de sacrificio del joven los éxitos que está teniendo -quedó subcampeón sub 23 de México en la contrarreloj y en la carrera en línea en el último campeonato del país- también culpa mucho de ello al equipo que trabaja para que tenga todo el apoyo técnico que necesita.
Por ejemplo, Vicente González, el médico del Patronato Deportivo Municipal de la Mancomunidad Cabo Peñas, que entre otras ocupaciones tuvo la de médico del equipo ciclista Clas-Cajastur, y que según el entrenador "es toda una institución en medicina deportiva".
También destaca el trabajo del biomecánico José Antonio Berdayes, un hombre con muchos conocimientos en su disciplina que ha sido decisivo para mejorar el rendimiento del joven encima de la bicicleta.
La presencia del mexicano en Carbayín no ha caído en saco roto. El joven se ha encontrado con el calor y el apoyo de mucha gente, hasta el punto que ya cuenta con verdaderos seguidores. "Me para gente por la calle todo el tiempo para preguntarme por la carrera, y algunos vecinos tienen previsto viajar a Innsbruck la próxima semana para animarlo", aseguró el entrenador.
Gustavo Gutiérrez trabaja los veranos en Belmonte de Miranda, y ha conseguido también una ligazón de aquel pueblo con el corredor. Por lo pronto, el patrocinio cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Belmonte. Esta creciente afición al ciclismo del concejo se vio algo mermada por problemas técnicos: no podían ver la Vuelta a España en Teledeporte porque no llegaba la señal.
Cabe esperar que si algún día llega la joven promesa a correr alguna gran vuelta, belmontinos y sierenses se unirán para animarlo allá donde esté.
