Daniel García Ron (Oviedo, 1975) es el actual director del colegio público Condado de Noreña. Lleva dos años en el cargo, tras haber dirigido anteriormente el colegio público Clara Campoamor de Riaño. En Noreña se ha centrado en promover un cambio de las técnicas educativas, adaptándolas a los tiempos actuales. García Ron se muestra, además, encantado con que el Principado de Asturias y el Ayuntamiento vayan a iniciar próximamente la rehabilitación del gimnasio escolar, la ampliación del patio cubierto y la sustitución de la superficie de la pista deportiva.
- ¿Cuál es su motivación como director del colegio?
-Siempre buscamos la mejora del centro. Nuestro objetivo claro es que los niños vengan a gusto al colegio, que sea una felicidad para ellos.
- ¿Cómo se logra eso?
-Al llegar aquí, rápidamente observamos ciertas cosas. Por ejemplo, queríamos que la biblioteca no fuera un archivo de libros, sino el lugar de donde partieran todos los proyectos elaborados por los alumnos, un lugar para ellos. También vimos la necesidad de que las nuevas tecnologías entraran rápidamente.
- ¿Cómo afectan las nuevas tecnologías a la hora de enseñar?
-Es clave cambiar la metodología. Con los niños de ahora no podemos utilizar las técnicas educativas de antes, ya que hablamos de chavales que están hiperestimulados, les llegan estímulos constantes. Tienen toda la información a su alcance dándole a una tecla en el ordenador o a través de una tablet. Ese concepto que se tenía del maestro como aglutinador de contenidos ya no es así. Ahora su principal fuente de información es internet y nosotros lo que tenemos que hacer es dotarles de herramientas para gestionar esta cantidad de información, su vida y darles ciertas competencias. Los métodos con los que se nos educó a nosotros ya no valen para estas generaciones.
- ¿Qué urge mejorar?
-Siempre pedimos que acorten el currículo escolar español. Es muy extenso, no tiene sentido. Tengo la sensación de que los niños estudian para olvidar. Eso no está bien, no debe ser así. Deben crearse como personas en los colegios y en casa, eso es lo prioritario. No soltarles una retahíla que luego van a olvidar. En otros países, como Finlandia y Alemania, rápidamente entendieron que esa extensión de los temarios no tiene razón de ser. Sin embargo, aquí, con cada reforma, nos lo aumentan más. Tengo claro que prefiero dar algo bien y que se les quede grabado.
-¿Qué nuevas técnicas aplican en el centro?
-Estamos trabajando en el aprendizaje basado en proyectos. Consiste en elaborar proyectos en grupos o en el conjunto de la clase, con lo que los alumnos, en el desarrollo del mismo, ya obtienen el conocimiento que se les transmitiría con lecciones al uso. Así lo logran por sí mismos y lo asimilan mejor. Dicho esto, no creemos en usar exclusivamente este método. La idea es que funcione de manera complementaria a otras, incluido el libro de texto.
- Hablando de métodos, ¿qué piensa de los deberes?
-Aquí en Asturias hay unas recomendaciones al respecto. Nosotros creemos que el niño tiene que salir con los conocimientos del centro, no llegar a casa y darse cuenta de que no ha entendido nada. En nuestro caso, nos coordinamos para no enviar un exceso de tarea. Los niños no deben pasarse horas para entender algo que tienes que explicar en clase.
- ¿Cómo es la relación con los padres?
-Las familias son muy colaboradoras. Entienden la educación como nosotros, por su parte han sido todo facilidades. Por nuestra parte, les hemos abierto el colegio para que participen de todas nuestras actividades. La educación es cosa de toda la tribu, como dice una compañera del centro.
- La Consejería de Educación y el propio Ayuntamiento de Noreña han anunciado varias obras en el centro.
-Es algo muy necesario en este colegio. Cuando cogimos la dirección nos encontramos con un colegio que parecía más bien de "Cuéntame" que otra cosa. El Ayuntamiento presentó muy buena predisposición para mejorar esto. Nos preguntaron lo que necesitábamos. También entiendo que hay una cierta empatía por parte de la Alcaldesa, que es compañera del sector educativo. La colaboración entre el centro, el Ayuntamiento y la Consejería ha sido fundamental. Arreglar el gimnasio es algo prioritario, también aumentar el patio cubierto y cambiar la superficie de la pista deportiva. Respecto de actuaciones pasadas, rediseñar la biblioteca y contar con un aula de informática, como la que tenemos ahora, también nos ha permitido mejorar la calidad educativa.
