"No me siento perdedora en absoluto". Así de contundente se mostraba ayer Paula Onís tras conocer que la candidatura a la presidencia de la comisión de Foro Siero de Eduardo Martínez Llosa se había impuesto a la suya.

Se mostró, al contrario, "muy orgullosa de haberlo intentado" y muy agradecida con toda la gente que la apoyó, el equipo que estuvo con ella y quienes la votaron.

Por otra parte, se puso "a disposición del partido hasta mayo". Con esta frase, Paula Onís parece haber dado a entender, aunque no lo dijo abiertamente, que renuncia a una posible integración en la candidatura de Eduardo Martínez Llosa, y que una vez que concluya el presente mandato, en el que ejerce de concejala en el Ayuntamiento, pasará a una posición menos activa en el partido.

La candidatura de Paula Onís, que surgió a raíz de desavenencias surgidas entre ella y el que finalmente acabó siendo su rival en las primarias, se tomó desde un principio como algo normal dentro del juego político interno que no tenía por qué afectar a la imagen ni a los resultados del partido en Siero. Y de hecho se habló de que tras las primarias la idea del partido era permanecer unido e integrar de nuevo a toda la militancia en pos de unos buenos resultados electorales.

Ahora cabe preguntarse si será así, si Foro Siero podrá pasar página a partir de las primarias o si se verá lastrado de alguna manera por la división, siquiera momentánea, que siempre acarrea el enfrentamiento de dos candidatos cuya ambición es ponerse al frente del partido.