La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Una multinacional en la buhardilla

"Fijar población no es solo retener, sino también atraer creando empleo cualificado", afirma Higinio Iglesias, fundador de la firma praviana Ebroker

Una multinacional en la buhardilla

Fijar población en el medio rural es la asignatura pendiente de la España vaciada y de la Asturias que pierde peso en ambas alas. De tal calibre es el problema que, con el fin de frenar el despoblamiento, el Gobierno de España acaba de instituir el Ministerio para el Reto Demográfico y nuestro Principado ya creó el año pasado la figura del Comisionado para ese mismo fin.

Tal vez los responsables políticos nombrados para tan noble tarea deberían contactar con Higinio Iglesias, creador y CEO de Ebroker, para conocer la fórmula de su éxito al conseguir fundar y desarrollar en Pravia una multinacional tecnológica que actualmente emplea a cincuenta trabajadores, da servicio a setecientas empresas repartidas por toda la geografía nacional e incluso, recientemente, se ha expandido a Perú y a Bulgaria.

"Fijar población no es sólo retener, sino también atraer", afirma con contundencia este emprendedor que ha situado a Pravia en el centro del mapa del sector tecnológico nacional e internacional. Si Steve Jobs creó Apple en un garaje, Higinio Iglesias fundó Ebroker en una buhardilla.

Aunque se identifica a este empresario con la villa praviana, muy pocos conocen que nació en el pueblo de Espinosa, cercano a la cueva prehistórica de San Román de Candamo, en 1963, siendo el primogénito de tres hermanos. Su madre Celsa, natural de allí, se casó con Higinio, un marino de El Castillo, pueblo de pescadores de Soto del Barco ubicado junto a la desembocadura del Río Nalón.

Después de nacer Higinio, sus padres se trasladaron a residir a Pravia, localidad en la que ya vinieron al mundo el resto de sus hermanos, y fue entonces cuando su padre cambió su trabajo de navegar en un petrolero por otro más sedentario en Ensidesa.

Higinio cursó sus estudios primarios y secundarios en el colegio San Luis y en el Instituto de Pravia. Luego se trasladó a Oviedo para estudiar Graduado Social. En 1983 tuvo una breve experiencia política durante un mandato al ser elegido concejal de Cultura, Festejos y Protección Civil en la etapa que Francisco Javier Casielles ejercía como alcalde.

A mediados de los ochenta se asocia con unos abogados para instalar una asesoría en la villa del Rey Silo, y en 1990 crea una correduría de seguros. En 1993, junto a ocho colegas de otras comunidades autónomas, participa en la creación de la primera cooperativa del sector asegurador español, que fue el germen del asociacionismo en la industria aseguradora. En apenas siete años se suman al proyecto más de un centenar de profesionales del sector y en el 2000 la cooperativa se convierte en entidad mercantil.

Anteriormente, entre 1998 y 2000, este numeroso grupo de mediadores de seguros buscaba un programa informático que les diera un servicio común. Dieron vueltas por el mercado y no lo encontraron. Fue entonces cuando pusieron los ojos en el software que había creado Higinio con un informático de Pravia, ambos adelantados a su tiempo, para dar soporte a su propia correduría entre 1990 y 1998. La comitiva de análisis de la cooperativa de corredores de seguros se desplazó a la villa praviana y a partir de aquel primer programa se comenzó a construir entre 1999 y 2000 un nuevo desarrollo informático en una buhardilla de Pravia equipada con unos tableros, unas mesas de mimbre, unos caballetes y unas sillas de playa. Allí se fue a trabajar Higinio junto con el programador Alejandro Martínez, y posteriormente se incorporaron Agustín Marcos, David Sánchez y Fernando Ortigosa.

Fruto del trabajo en aquella buhardilla, ubicada en la calle Carmen Miranda, se fabricó el primer producto comercial desarrollado a partir del primitivo programa informático de la correduría de Higinio. Se incorpora entonces al proyecto Nuria Hurtado, quien viene desde Albacete para potenciar el departamento comercial.

De la buhardilla se trasladan a un piso en la calle Agustín Bravo, donde se encuentra la actual sede de la empresa. En aquel momento, Pravia presenta un proyecto de cableado a un operador de fibra óptica y en 2006 se incorporan al proyecto "Pistacable" que les permite, a través de Telecable, instalar fibra óptica en su nuevo piso de la calle Agustín Bravo y facilitar el vertiginoso crecimiento de la empresa.

"Potenciar las comunicaciones en el entorno rural ha permitido el desarrollo de esta empresa situada también muy cerca del aeropuerto", señala Higinio.

En el citado piso sólo permanecen dos años porque el proyecto comienza a crecer y necesitan más espacio. Compran entonces la planta baja y hoy poseen unas instalaciones que superan los mil metros cuadrados y dan empleo directo a cincuenta personas. Comercializan un software asegurador por todo el territorio nacional tanto para las principales compañías aseguradoras como para los mediadores de seguros.

Sus primeros clientes, entre la buhardilla y el piso, procedían de Barcelona, Murcia, Galicia y Madrid. Hoy ya están presentes en Lima y Sofía.

"Fijar población en un entorno rural de los cuatro mil habitantes que puede tener Pravia necesita un equilibrio de actividades de sectores primarios y profesionales cualificados. Los jóvenes tienden a marcharse fuera a trabajar y debemos crear ocupaciones que generen empleos cualificados como ingenieros informáticos, industriales, de telecomunicaciones, expertos en marketing, licenciados en Derecho y en Económicas", indica Higinio.

"No se trata sólo de fijar población, sino también de importar profesionales cualificados. La creación de empleo cualificado es fundamental para fijar población en el mundo rural. La cercanía del aeropuerto también nos ha ayudado mucho al desarrollo de la empresa. Para desarrollar un producto tecnológico se necesitan ingenieros informáticos y actualmente damos soporte a setecientas empresas. En 2015 nos instalamos en Perú y ahora estamos valorando desarrollarnos en otros países de latinoamericanos. En 2018 también entramos en Bulgaria", afirma.

Como ejemplo de captación de profesionales cabe reseñar que el próximo mes de febrero se incorporará a esta empresa tecnológica de Pravia un ingeniero industrial que trabaja actualmente en una multinacional en Madrid y se trasladará a residir a la villa praviana junto con su familia.

Esta empresa está actualmente en una fase de desarrollo y crecimiento que no pone límites a las distancias porque el mercado está totalmente globalizado. Higinio manifiesta: "Nuestro objetivo es crecer ordenadamente de manera sostenible. Podríamos crecer más rápido, pero preferimos dar pasos sólidos y consistentes". Esta "micromultinacional", como la define su creador y actual CEO, cumplirá veinte años en este ejercicio, y seguro que lo celebrarán por todo lo alto.

Su actual reto: "formar a la siguiente generación que tiene que tirar por esto. Los jóvenes de treinta años deben dibujar el futuro de la empresa, pero siempre en Pravia. Tenemos empleados que llevan diecisiete años en la empresa y que comenzaron con dieciocho, lo que nos garantiza la continuidad del proyecto".

A Higinio Iglesias le han sobrado oportunidades y ofertas profesionales para trasladarse a Madrid, pero siempre las ha rechazado. Su proyecto, su empresa, es una gran familia y debe estar en Pravia. Su esposa, Elena Selgas, con quien lleva casado treinta años, gestiona desde 2001 la correduría de seguros junto con su hermana Mar Iglesias.

Además de su empresa, Higinio es también un hombre muy implicado con su villa. Muestra de ello es su activa participación, desde hace años, en la Cofradía del Xiringüelu para reconducir esta fiesta que reúne a más de cuarenta mil personas en Pravia cada primer domingo de agosto, con todo lo que ello conlleva. Asimismo, el pasado mes de septiembre tuvo el honor de ejercer como pregonero de las fiestas del Santísimo Cristo de la Misericordia y de Nuestra Señora del Valle en su amada villa praviana. Sin duda, Higinio ha sido profeta en su tierra y contribuye a fijar y atraer población mientras genera riqueza con la expansión de la multinacional tecnológica que fundó en una buhardilla de Pravia.

Compartir el artículo

stats