El único contenedor de basura que tienen los vecinos de Lieres que viven junto a la carretera N-634 luce repleto de bolsas de basura, "no cierra". Los residentes en la zona denuncian esta circunstancia, que "se viene repitiendo desde que quitaron el otro que había". Temen que en los próximos días, con la apertura de los negocios que están en las proximidades, la cosa vaya a peor: "Esto ya es un criadero de ratas".
El problema, según relata José Julio Martínez, comenzó en el mes de enero. "Teníamos dos contenedores y nos retiraron uno sin mayor explicación".
Al ver que el depósito se desbordaba a diario y especialmente los fines de semana, "cuando no se hace recogida", se pusieron en contacto con el Ayuntamiento. "Este nos remitió a la empresa que se encarga de la basura. Ellos no nos hicieron ningún caso y nos dijeron que si queríamos otro contenedor lo teníamos que pedir por escrito al Ayuntamiento", cuenta Martínez.
Él y los vecinos de la zona -conformada por unas quince casas- están preocupados por la situación, que facilita la proliferación de roedores. "Cuando abra la cafetería esto va a ir a peor. Y, por supuesto, estamos encantados con la cafetería. Lo que pedimos es que se ponga otro contenedor más y a ver si se puede recoger algún día más, fundamentalmente los fines de semana", concluye Martínez, quien, junto a su padre, instaló una barrera para que los cubos no se escaparan con el viento: "No habían puesto nada".
