Dos vecinos de Bedriñana, Lydia Puerta y José Javier Fernández, se llevaron una buena sorpresa al encontrarse una cría de corzo deambulando, desorientada, por la zona de La Ermita del pueblo villaviciosino.

"Encontramos un 'corzín' de muy poco tamaño y solo en la salida de paseo del atardecer. Parecía perdido o que estuviera huyendo de algún depredador. Estaba en la carretera intentando cruzar una valla de cierre de una finca que no podía saltar. Lo cogimos en brazos porque parecía asustado y sin su madre. Nos dio mucho miedo que lo pudiera atropellar un coche", explican Lydia y José Javier, quienes también temían que pudiera ser atacado por cualquier otro animal. "En una finca muy cercana acabábamos de ver un jabalí enorme y temimos que lo pudiera matar porque era muy chiquitito", añadían tras recoger al joven corzo.

Tras la sorpresa inicial de estos amantes de los animales, el afán por proteger la pequeña cría les llevó a pensar que la madre no debía estar muy lejos. "El corzín parecía llorar llamando a su madre y creemos que esto fue lo que logró alertarla, hasta que la vimos aparecer en su busca y lo soltamos", explican los vecinos de Bedriñana tras la inusual imagen y la experiencia vivida.