Pasados ya unos meses de la confinada festividad de los Güevos Pintos de Pola de Siero, los pequeños de la casa, que aún no han podido comprar sus figuras, se llevaron una alegría. "¡Oh, es un teléfono!", exclamaba encantada la pequeña naveta Abril Solares al abrir el regalo que le correspondía como ganadora del concurso de dibujo organizado por el Ayuntamiento.
"Hice un güevo decorado con un caracol en el sol", explicaba tímida, mientras aún no se creía la victoria. "Llevo diciéndoselo toda la semana y hasta hoy no se daba cuenta", bromeaba Noelia Simón, la madre de la pequeña de cuatro años.
Era la primera vez que se llevaba un premio, pero lo de ganar concursos por Güevos Pintos es una tradición familiar: "La hermana, que ya había llevado algún premio, fue la que la arrastró. En su momento yo también gané, y mis hermanas", explicaba Simón.
Mientras, la niña no dejaba de dar botes de alegría con sus juguetes nuevos. "Tengo ganas de estrenarlos con mis amigos, llevo tiempo sin verlos", sentenciaba.
La felicidad de Solares la compartía la polesa Sofía Lera, ganadora de la categoría de entre 10 y 12 años. "No me esperaba para nada ganar, es la primera vez que me llevo algo así. La verdad que dibujar me ayudó a sobrellevar el confinamiento", resumía.
Su diseño se basó, precisamente, en todo lo que echó de menos durante los dos meses de encierro y que coincide con los principales atractivos de la Pola: "Sale la iglesia, el paraguas, la fuente y las estatuas de Les Campes".
El concurso, organizado por el Ayuntamiento, contó con tres categorías. En la de menor edad, la primera clasificada fue Solares y segunda quedó Ángela Fano. En la intermedia se impuso Carlota Fano por delante de Eva Díaz.
Finalmente, entre los más mayores (de 10 a 12 años), el premio fue para la citada Lera, inmediatamente seguida de la joven Vega Fernández Roces.
