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Siero mantiene los mercadillos al aire libre tras plantear cancelarlos por la pandemia

El Consistorio permite hoy los puestos ambulantes en Lugones, pero podría rectificar la próxima semana y suprimirlos si aumentan los contagios

Patricia Serna, comprando en uno de los puestos del mercadillo de Pola de Siero. | A. I.

Los mercadillos al aire libre de Siero sobreviven una semana más a la amenaza de cancelación. El Gobierno local, tras advertir en la Junta de Portavoces que se estaba planteando suspenderlos –una vez el concejo entró en el denominado riesgo “4 plus” por la alta incidencia de la pandemia–, ha decidido mantener el permiso a los puestos ambulantes de esta semana. Ayer se celebró el habitual despliegue de puestos de venta en El Berrón y hoy se hará en Lugones. Eso sí, en función de cómo avancen las cifras de contagios en el concejo y según cuales sean las recomendaciones de los otros niveles de la administración, cabe la posibilidad de que se suspendan la próxima semana.

La posibilidad de que se vetaran los mercadillos lleva sobre la mesa desde la Junta de Portavoces del martes. Entonces el PSOE mostró su voluntad de tomar medidas aún más drásticas de las marcadas por el Principado, para tratar de revertir lo antes posible las restricciones a las que el concejo está sometido por la incidencia del covid-19.

La idea que sugirió el Ejecutivo local fue eliminar los mercadillos al aire libre por un tiempo. A la mayoría de las formaciones de la oposición no les convenció este planteamiento, pidiendo PP IU y Somos que se fundamentara la decisión en informes de expertos que avalasen que, en efecto, los puestos de venta ambulante son un lugar de potencial riesgo de contagio.

Los populares fueron incluso más lejos, señalando que, “en vez de restringir aún más las posibilidades de ganarse la vida de las familias, sería recomendable contar con un suficiente número de agentes de policía para controlar la seguridad”.

La idea del Gobierno, sin embargo, era anunciar la supresión ese mismo martes, una vez contaran con las cifras de contagios del día. No sucedió, aplazándolo al miércoles y, finalmente, a la jornada de ayer, cuando se confirmó que los ambulantes podrán seguir vendiendo, al menos, esta semana.

Sin embargo, no se descarta que en los próximos días el criterio pueda cambiar y se acabe por oficializar la cancelación. Por el momento es seguro que los puestos saldrán a la calle hoy en Lugones.

Asimismo, se oficializó que los vendedores no tendrán que pagar las tasas municipales en los próximos meses, para ayudarles a sobrellevar el complicado contexto. Lo mismo que los hosteleros, que en Siero ya no cuentan con ninguna ordenanza municipal que regule el pago de la instalación de terrazas. Por tanto, si en el futuro se desea volver a aprobar este impuesto, será necesario componer una nueva normativa. Tanto la hostelería como la venta ambulantes son dos de los sectores más golpeados por la pandemia.

En el caso de los zabarceros, la polémica ha sido constante desde que se recuperó la actividad tras el primer confinamiento. Entonces, el Ayuntamiento prohibió a los que comercian con excedentes de la huerta situarse en los bajos que habitualmente ocupaban en el parque de la Paz de Lugones, provocando su rechazo, que expresaron en varias manifestaciones, sin resultado.

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