La población en Siero crece a un ritmo sostenido y también lo hace la que está en edad escolar. El gobierno local ha planificado el desarrollo de nuevas infraestructuras educativas en estos años y afronta el proyecto para edificar una nueva escuela infantil, para bebés, en la Pola. Con ella se darían por cubiertas, de momento, las necesidades futuras de este tipo de servicios, claves para la conciliación de la vida laboral y familiar.
El ayuntamiento de Siero tiene analizada la demanda de plazas en todos los tramos de educación obligatoria y, a falta de finalizar la construcción del IES de La Fresneda, en todas las etapas están cubiertas las necesidades. También, en cuanto a las escuelas infantiles. Está prevista una más en la Pola, pero hasta ahí.
“A día de hoy descartamos totalmente proyectar nuevas escuelas infantiles porque no hay ningún indicador que nos demande que haga falta, pero sí que estamos muy pendientes de la evolución y de ver qué ocurre por si fuera necesario, ya que el municipio está creciendo y queremos que sea atractivo para venir a vivir”, explica el alcalde, Ángel García.
Este curso, muy particular por la pandemia, han quedado cuatro plazas vacantes tanto en la de Lugones como en la ya existente de la Pola.
De las 46 plazas que ofrece la escuela infantil lugonense sólo se han cubierto 42. Un centro en el que hay más niños en el tramo de edad de dos a tres años, con 23 alumnos. También hay 11 escolares de uno a dos años y ocho bebés. En cuanto al equipamiento de la Pola, cuenta con 34 alumnos, siendo también el curso de dos a tres años el que más niños acumula, con 16 matriculados. En el aula de uno a dos años hay 11 escolares y otros siete en el área destinada a los menores de un año, que requieren asimismo otro tipo de cuidados más específicos.
Lo que sí sigue adelante, incide, el regidor, es la construcción de una nueva escuela en la Pola que “es lo que pone en nuestro contrato con los vecinos”, en referencia a que el proyecto figuraba en el programa electoral de los socialistas.
El alcalde insiste asimismo en que el actual modelo de gestión de estos centros educativos se debe revisar para darle otras soluciones. “Se deben integrar en la consejería de Educación, que es la competente, porque para los ayuntamientos es un problema”, señala.
Los concejos reciben una aportación ecónomica, vía convenio con el Principado, que para el regidor sierense es “un modelo atípico”. García ha señalado en varias ocasiones esa necesidad de cambio del actual sistema de gestión de las escuelas infantiles y lamenta que sea un tema que siempre se quede encima de la mesa sin resolver. “Tiene que cambiar y siempre se queda pendiente, veremos a ver ahora si se produce un cambio y las hacen obligatorias”, concluye.
