La ría de Villaviciosa y su entorno son uno de los lugares preferidos de la cigüeñas blancas como punto de descanso y alimento en Asturias. En la últimas primaveras cada vez son más los ejemplares que procedentes de África o Castilla, donde pasan el invierno, se ven llegar a los humedales de la Reserva Natural Parcial de la Ría maliayesa, donde hacen parada para reponer fuerzas antes de continuar ruta a países de Europa del Norte.
En los últimos días un bando de ocho de estas cigüeñas llegó a los terrenos encharcados de los porreos de la ría en Tornón para sorpresa de vecinos. “Se ve que están encantadas, porque descubrieron unas tierras recién sembradas de maíz. Se las ve muy relajadas alimentándose todas en fila perfecta, es un espectáculo visual. De vez en cuando levantan el vuelo y se van a comer a la ría, donde encuentran abundante comida como cangrejos, ranas, peces y otras especies”, explica Guillermo Cadavieco, vecino del barrio de la Venta.
Según el maliayés en los últimos años ya se habían visto en estos porreos algún ejemplar solo o en pareja. “Verlas desde casa juntas es un lujo. No queremos molestarlas para que estén tranquilas y permanezcan aquí cuanto quieran”.
