Las parroquias rurales de Ambás y Tamón, en el concejo de Carreño, están cerca de contar con el colector principal de saneamiento, según se ha comprometido el Principado durante el día de ayer. Ese compromiso fue la principal conclusión de la reunión que mantuvieron la alcaldesa de Carreño, Amelia Fernández, con la viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, y también con la directora general del Agua, Vanesa Mateo.

Alcanzar con el saneamiento a esos dos núcleos de la zona rural es una de las demandas pendientes del concejo, que se enmarcaría de esta manera dentro del Plan Director de Saneamiento y Depuración de Aguas del Principado, que prevé una inversión en torno a los 476 millones de euros para seguir avanzando con la instalación de redes de saneamiento en el territorio asturiano.

Desde la Consejería de Medio Ambiente se ha alcanzado el compromiso de redactar el proyecto durante este año 2022. También ambas instituciones han acordado explorar futuras vías de colaboración o posibles convenios para dar soluciones pendientes a otros temas de saneamiento.

En la reunión, celebrada en la sede de la Consejería, en Oviedo, también estuvieron presentes Jorge Alperi, jefe de servicio de Planificación Hidráulica y Calidad del Agua, y Fernando García, arquitecto municipal.

Con esta actuación se llegaría a una de las zonas que queda pendiente de contar con saneamiento, después de que también durante el último ejercicio se haya ido acelerando la ampliación la red en los tramos rurales por parte municipal, con diferentes ramificaciones de colectores ya existentes.

La redacción de los proyectos de actuación en los barrios de Cespedera o Xelaz, en las parroquias de Guimarán y Pervera, ya ha sido sacada a licitación a finales de 2021, esperando poder comenzar con las obras durante 2022. También en la zona de El Cuto, en Albandi, se está pendiente de una expropiación para poder avanzar con los diferentes ramales de saneamiento desde el colector principal.