La comarca del Caudal ya tiene oficialmente una cooperativa de maderistas. La asociación El Maeral acaba de firma en notaría la constitución de esta plataforma empresarial con la que pretende generar un nuevo nicho de negocio en el territorio. Tras recibir el proyecto el visto bueno del Principado, la cooperativa se ha puesto en marcha con 43 socios fundadores. A última hora se ha sumado al proyecto Maderas Siero, líderes europeos en productos vinculados al castaño. Además, el director gerente de la cooperativa, Juan José Menéndez, destacó que la iniciativa pronto se ampliará a la comarca del Nalón. De hecho, ya se han mantenido contactos con el Ayuntamiento de Langreo y en breve comenzará una ronda de entrevista con alcaldes pedaneos.

Tras meses de trabajo, El Maeral ha dado un paso definitivo dentro de su ambicioso plan de aprovechamiento forestal. Si bien la asociación llevaba ya un año comercializando su producción, a partir de ahora lo harán ya como cooperativa. El grupo ya cuenta con direcciones locales en Morcín, Riosa, Mieres, Lena, Aller y Ribera de Arriba. Pero el horizonte se ha ampliado a la zona del Nalón. Si bien inicialmente la asociación pretendía centralizar su actividad en la comarca del Caudal, está ya decidido que dará el salto al Nalón abarcando así todo el territorio de las cuencas mineras. El interés mostrado por el gobierno local de Langreo ha sido clave para que los maderistas hayan decidido ampliar su marco de actuación. El objetivo es crecer rápido: "A finales de año esperamos contar ya con al menos un centenar de propietarios de fincas", remarcó Juan José Menéndez. De momento, están siendo las administraciones, sobre todo los ayuntamientos de la comarca, lo principales clientes del colectivo, que esperan poco ir ampliando el mercado.

Además de expandirse territorialmente, El Maeral espera poner en marcha en los próximos meses otras dos cooperativas. Una será ganadera y otra agrícola. En la segunda tienen previsto dar cabido a la primera envasadora industrial de miel de las Cuencas. El objetivo es que esté funcionando el próximo mes de septiembre en el Centro de Empresas del Caudal, en el polígono mierense de Vega de Arriba, con una producción de 27 toneladas al año. La dulce iniciativa busca implicar a todos los apicultores de la comarca. De momento es la asociación asentada en Moreda, la única que permanece activa en el ámbito de la comarca del Caudal, la que respalda el proyecto y con la que se ya se celebró una primera reunión. La planificación completa arranca con la participación de más de medio centenar de apicultores y cerca de dos mil colmenas.

En cuanto a la cooperativa que ya es una realidad, la de los maderistas, Juan José Menéndez, prevé que su crecimiento está asegurado: "Hemos empezado con 43 socios fundadores, pero han sido muchos más los propietarios de terrenos que se han puesto en contacto con nosotros y que, según vaya avanzando el proyecto, se irán sumando con toda seguridad". Los socios cooperativistas deberán pagar una cuota de inscripción de 85 euros y podrán comprar títulos, con un coste de 25 euros cada uno, hasta un máximo de 24 (600 euros). Canalizarán sus ventas a través de la cooperativa, que asumirá la compra de toda la producción y su posterior comercialización. Además, se está negociando la compra de una finca para construir un aserradero y un centro logístico desde el que canalizar la venta de los productos.