El "argayón" que prácticamente aisló el concejo de Caso, y cuyas obras siguen en marcha, sigue afectando en el día a día de los vecinos y de las obras que tienen que desarrollarse en el municipio. Es el caso de los trabajos de transformación del recinto ferial de Campo de Caso, que pasará a ser un edificio multiusos. Pero para lograrlo deben llegar una serie de bloques de hormigón de varias toneladas, que ahora no pueden transportarse, ya que el paso alternativo abierto permite el paso de vehículos de hasta 3,5 toneladas, y la carretera de la Collá d'Arniciu no está en condiciones para que por ella pase un camión cargado.

"Las obras del recinto ferial están en marcha, pero van poco a poco por las limitaciones en el transporte del material", explicó el alcalde casín, Miguel Fernández. La reforma incluye la instalación de varios bloques de hormigón, "que lógicamente no se van a traer de uno en uno, y la carretera de Arniciu no da para que pase el transporte. Tenemos limitaciones, y se avanza, pero poco a poco", añadió el regidor.

Esta reforma forma parte de las obras de compensación que Cadasa (Consorcio para el Abastecimiento y Saneamiento en el Principado) realiza en los concejos que acogen los pantanos que suministran agua al centro de Asturias. Los trabajos consisten en instalar un cierre perimetral del recinto y colocar techo en la zona que lo precise, en los pasillos intermedios que ahora se cubren con toldos. Con un presupuesto de licitación de 170.516 euros, al concurso se presentaron 13 empresas y la adjudicataria fue Construcciones Jaime Fernández, que realizará las obras por 119.306 euros. Con la transformación, el ferial podrá utilizarse "para distintas actividades", y no sólo para ferias ganaderas.