La Plataforma por la defensa del ferrocarril en el Occidente de Asturias y la Asociación de Usuarios de Feve-Renfe organizaron hace unos días un viaje atípico en tren con el que trataban de reivindicar mejoras en el servicio que cubre esta zona. Una protesta en la que participaron alrededor de un centenar de usuarios, quienes recorrieron la línea férrea entre Santa Marina y Ribadeo. Además, lograron el apoyo de varios alcaldes de los municipios afectados como fueron la regidora de Tapia, Ana María Vigón; y el de Ribadeo, Fernando Suárez, así como otras organizaciones políticas que también quisieron sumarse.

Los manifestantes pretendían que la operadora mejorase los servicios e infraestructuras. Y es que, al igual que ocurre en otras líneas de la antigua Feve, también están sufriendo retrasos y averías en los trenes. Y relaman que se hagan mejoras en las vías, lo que ayudará en gran medida a aumentar la velocidad de los convoyes y mejorar los horarios actuales.

Junto a los vecinos, los partidos también se están pronunciado para exigir mejoras en la antigua Feve. Así, desde Podemos emitieron ayer un comunicado en el que mostraban su "preocupación ante el caos ferroviario que están sufriendo los vecinos de Aller y Carbayín, en particular, y los asturianos en general". Por ello, reclaman "una política de inversiones sólida, y una apuesta decidida, constante e integral por potenciar y modernizar la red de cercanías de Asturias, una red fundamental y necesaria para vertebrar el territorio, a sus gentes y la actividad económica de la comunidad".

De la misma manera se manifestaban ayer en Foro. El presidente de la formación en Aller, Pablo González, aseguró que "es una vergüenza el abandono total en el que se encuentra la línea de transporte ferroviario en el concejo de Aller". Por ello, exigió que se subsanen las deficiencias y se mantenga el servicio.