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El plan para evitar suicidios testado en la comarca llegará en marzo a toda Asturias

Los profesionales del área atendieron desde marzo a 42 personas, de las que 10 están en seguimiento

El plan de prevención y detección precoz del suicidio -implantado a principios de año de forma experimental en el área sanitaria VIII, correspondiente al valle del Nalón- estará funcionando en marzo en toda la región. La implantación se realizará de forma gradual. El protocolo ya se ha extendido al área sanitaria de Oviedo y, en octubre, se aplicará en las de Gijón y Avilés. Incluso otras comunidades autónomas, como el País Vasco, se han interesado por el plan para estudiar su posible implantación. En la comarca del Nalón, desde que se puso en marcha, se ha atendido a 42 personas, de las que 10 permanecen en seguimiento.

Los responsables sanitarios regionales destacaron los buenos resultados cosechados por la experiencia hasta el momento tanto en el valle del Nalón como en Oviedo, la segunda área donde se implantó, en junio. "El pilotaje ha sido un éxito hasta ahora. Decidimos empezar en el área VIII, que además tiene el sello de calidad de la 'Joint Commission'", explicó José Ángel Arbesú, responsable de la Unidad de coordinación de salud mental del Principado: "Se está implantando de forma gradual. El primer paso es la presentación del proyecto en cada área y después se lleva a cabo la formación del personal de Primaria, Urgencias y Salud Mental, antes de la implantación del plan".

Tras el valle del Nalón y Oviedo, el plan comenzará a funcionar en octubre en las áreas de Gijón y Avilés, con lo que "ya llegaremos a una población de 800.000 personas", indicó Arbesú, que añadió: "Después se aplicará de forma progresiva en el resto de áreas. La idea es que esté funcionando en todas ellas en marzo de 2019, un año después de ponerse en marcha en el valle del Nalón. No han llamado del Gobierno del País Vasco porque quieren referenciar el plan".

Desde mediados de marzo, los profesionales sanitarios del área VIII han atendido a 42 personas en riesgo. De ellas, un total de 10 personas están en seguimiento de forma constante, mientras que el resto han recibido el alta, expuso Arbesú.

La tasa de suicidios en Asturias está situada actualmente en trece casos por cada 100.000 habitantes. Se trata de un promedio similar al de los países nórdicos y muy superior a la media española (de 8,7 por cada 100.000 habitantes). Las Cuencas contabilizan una media de diez suicidios al año.

Pese a que, las comarcas del Nalón y el Caudal no tienen una incidencia de enfermedad mental más alta que el resto de la región, la situación social y la falta de expectativas suponen factores de riesgo para las conductas autolesivas. También el despoblamiento de las zonas rurales y el envejecimiento de la población influyen.

El programa se desarrolla a través de unos tests que se realizan a los pacientes y que son elaborados por profesionales de enfermería, psiquiatría, medicina familiar, trabajo social y psicología clínica. Los pacientes de riesgo elevado tienen una consulta de salud mental en menos de diez días, con un contacto telefónico previo.

Los profesionales exponen que en los suicidios no sólo interviene la patología psiquiátrica. También hay otros factores como la situación social, las expectativas personales o los valores del propio paciente. Esta última causa es complicada de evaluar porque requiere de un examen personalizado de cada persona. La reducción de las muertes es el principal objetivo del programa, pero hay más retos por cumplir. Los expertos quieren que el suicidio deje de ser un tema tabú.

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