Una campaña reivindicativa, y que apunta directamente a la actuación de la justicia con las víctimas de la violencia de género. Bajo el lema "Si llega tarde, no es justicia", las cinco concejalas de la Mujer del Valle del Nalón reivindicaron la "necesidad" de que los jueces y las leyes se pongan de lado de las víctimas, y que no vuelvan a producirse "sentencias y hechos vergonzosos", siempre "en contra de las mujeres". Destacaron que este cambio debe darse ya, cuanto antes, porque la violencia machista no decrece, y sigue una tendencia constante.

La presentación de la campaña "Si llega tarde, no es justicia" , con motivo del día contra la violencia contra las mujeres, se realizó en Campo de Caso. Estuvieron, además de las cinco concejalas de la Mujer de la comarca (Blanca Pantiga, de Langreo; Cintia Ordóñez, de San Martín del Rey Aurelio; Cristina Remesal, de Laviana; Pili Ruiz, de Caso, y Berta Suárez, de Sobrescobio), la directora del Instituto Asturiano de la Mujer, Almudena Cueto, representantes de asociaciones de mujeres, y cuatro alcaldes del valle (San Martín, Laviana, Caso y Sobrescobio).

El mensaje principal que se quiso transmitir fue claro: "La justicia muchas veces no es justa, y hay que decirlo". Las ediles reclamaron "más formación" para los jueces y para los juristas en materia de igualdad. "No puede ser que un juez, con la toga puesta, llame puta a una mujer que le está pidiendo ayuda", subrayó Pantiga. Este hecho, como "muchas sentencias, ahí está la de la manada, y más" hacen que "parezca que, para hacerte caso, tienen que matarte". Solo en Langreo, en tres años, hubo 340 expedientes de atención psicológica, de los cuales el 80% son de víctimas de violencia. Pili Ruiz incidió en el papel de la educación para, a largo plazo, reducir y acabar con la violencia machista.

Cristina Remesal aseveró que "estamos hablando de un tipo de terrorismo, y si no hay una unión clara de toda la sociedad, no se va a acabar". La lavianesa añadió que "en muchos casos la justicia, además, llega tarde, con sentencias desesperanzadoras, por lo que hay que seguir en la lucha. "Lo mostramos en el cartel de este año. La justicia es ciega, y hay que tirar de las balanzas para que se ayude a las mujeres". Cintia Ordóñez expuso que "ojalá no hubiera que celebrar un Día Internacional Contra la Violencia Ejercida Contra las Mujeres", y respaldó que "la justicia, a veces, no está al nivel". Berta Suárez cerró las intervenciones de las ediles contando una historia de violencia machista y de solidaridad femenina.