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Los afectados por el corte en la red en Sobrescobio no serán compensados por los perjuicios

El Estado responde que no se cobrará la parte del recibo de ADSL proporcional al tiempo que no hubo conexión a internet, pero elude las indemnizaciones

La localidad de Rioseco, afectada por el corte de internet. FERNANDO GEIJO

En la Biblia, y en las películas, David siempre puede a Goliat. El pequeño, que pelea y lucha por su dignidad, triunfa. La vida real es más prosaica y menos poética. La secretaría de Estado para el Avance Digital, el organismo encargado de contestar y valorar las reclamaciones contra las empresas tecnológicas, ya ha contestado a los vecinos de Sobrescobio, que estuvieron a principios de año toda una semana sin posibilidad alguna de conectarse a internet. El resultado de las reclamaciones presentadas, más de medio centenar, es decepcionante. No se cobrará la parte proporcional del recibo del ADSL que no pudo usarse -una semana, una cuarta parte del mes-, pero no se menciona nada más. De los posibles daños y perjuicios causados a particulares y negocios no se hace ni mención.

El concejo de Sobrescobio estuvo sin poder conectarse a la red durante una semana en enero, incluyendo temporal de lluvia en este periodo. El servicio de Consumo de la Mancomunidad facilitó que se presentaran las reclamaciones contra la empresa Movistar, que prácticamente tiene el monopolio de la presentación de este servicio -ya casi imprescindible en los hogares, irremplazable en los negocios-. Quien responde por la compañía es la Oficina de Atención al Usuario de Telecomunicaciones de la Secretaría de Estado para el Avance Digital: una reclamación contra una empresa la responde el Estado. En los casos en los que se adjuntó copia de las facturas del mes, se está empezando a no cobrar la semana en la que internet estuvo inoperativa. Si no se adjuntaron, habría que remitirlas, indicando el concepto reclamado.

De esta forma, la principal exigencia de los vecinos y de los negocios se ignora: los daños y perjuicios causados por la incomunicación. Lo explica Fito González, presidente del colectivo Redes Natural, cuyo negocio es uno de los afectados. "Se contesta como de oficio, sin tener en cuenta lo que es la verdadera reclamación. No valoran los daños que pudieron causar, no responden a lo que de verdad interesa", expuso el hostelero. Durante esa semana, por ejemplo, no se pudo cobrar con tarjeta, ni ofrecer wifi a los clientes, o la conexión con las distintas plataformas televisivas, en algunos casos incluso el propio teléfono. Tampoco se pudieron hacer trámites telemáticos ni presentar documentación ante las administraciones. Algo que contrasta con la propia contestación de la Secretaría de Estado, en la que insta a hacer seguimiento del expediente de forma telemática. "No solo es el dinero de la factura, son otras muchas más cosas que no se tienen en cuenta. Y de eso, pasan", concluye el presidente de Redes Natural.

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