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La Carisa se exhibe en Nembra

La localidad allerana abre el centro sobre la vía y los campamentos romanos, con réplicas de los hallazgos en las excavaciones

Una de las figuras reconstruidas en el centro de La Carisa. SILVEIRA

Si los romanos tardaron dos años en construir la Vía Carisa, el centro de interpretación que narra la entrada del Imperio en Asturias ha tardado más de una década en levantarse. Pero por fin, ayer, y tras un arduo trabajo de muchos años, la parroquia de Nembra, en Aller, ya cuenta con un equipamiento "único", en el que se puede conocer la historia de la entrada de legado Publio Carisio en Asturias.

Bajo en nombre de "Civica", el centro de interpretación ubicado en el núcleo de La Enfistiella tiene contenido para todos los públicos, y en palabras de Esperanza Martín, arqueóloga encargada de los trabajos de excavación en la Vía Carisa, ése era uno de los objetivos. "Aquí puede venir gente buscando datos técnicos y enriquecerse del trabajo realizado y pueden venir personas que desde cero empiecen a conocer esta parte de la historia de Asturias", indicó, justo antes de proceder a guiar una primera visita en la que participaron el alcalde de Aller, David Moreno, los representantes del resto de grupos municipales, la directora general de Patrimonio, Otilia Requejo, así como representantes del colectivo vecinal de Nembra, muy implicado en el proyecto.

El amplio recinto incluye numerosos paneles con información sobre la vía, su trazado, los campamentos descubiertos, la ingeniería romana, así como aspectos sobre los hechos bélicos que tuvieron lugar en el enclave. En el diseño se ha prestado especial atención a la accesibilidad para personas con discapacidad, no solamente motora, sino también visual y auditiva.

Además, en una gran sala en mitad del recorrido se puede ver una panorámica de las vistas que hay desde el monte Curriechos, además de réplicas de los vestigios encontrados en los campamentos excavados en La Carisa. Piquetas, puntas de lanzas, hachas, monedas, cucharas y hasta partes de una catapulta son algunos de los elementos que se pueden ver. Además, para los más pequeños también hay un espacio. Se trata de un "arqueódromo", donde podrán buscar piezas como las halladas en La Carisa. También hay un gran puzzle del interior del campamento de Curriechos, que deben completar.

David Moreno explicó que el aula, que desde ayer está abierta, tendrá un horario de mañana y tarde de miércoles a domingo, y que se ha contratado una persona para realizar las visitas guiadas. Durante un mes, el aula estará abierta gratuitamente al público, y luego se cobrarán 4 euros a los adultos y 2 a los niños.

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