El polígono de Argame, en Morcín, está de dulce, y nunca mejor dicho. El Ayuntamiento ha logrado vender la última de las parcelas municipales del enclave industrial, y lo ha hecho a una empresa puntera en la región. Se trata de Chocolates del Principado, compañía en la que se enmarca la marca Rialto, la que produce las famosas y exquisitas moscovitas. La compañía ya tenía una nave en el área morciniega y ahora extenderá su producción en estas instalaciones.
"Estamos muy satisfechos de que esta empresa haya apostado por Morcín, y que tenga una parte importante de su negocio en Argame", manifestaba el alcalde morciniego, Mino García, que en los últimos meses ha conseguido cerrar la venta de las dos parcelas que el Ayuntamiento poseía en Argame, y que ahora servirán para poder generar más empleo en el concejo. La primera de ellas fue a la empresa Fusoni, que pretendía también expandirse en Morcín. "Es una compañía con planes de expansión que tiene planes de futuro para seguir creciendo", valoraba entonces el alcalde de Morcín.
La segunda parcela municipal, de 1.700 metros cuadrados, salió a subasta el pasado octubre por unos 120.000 euros, sin contar el IVA. El Gobierno local decidió sacarla a subasta tras constatar el interés de varias empresas en hacerse con los terrenos para expandirse o crear nuevos negocios. Y finalmente fue Chocolates del Principado la que ganó esa puja. Una dulce noticia para Argame. "Es una doble alegría, porque por un lado tenemos una empresa que apuesta por crecer en Morcín y por generar actividad y empleo; y por el otro, con el dinero que ingresamos por la venta de la parcela, para un concejo como el nuestro, es muy importante para poder realizar inversiones para los vecinos", valoró Mino García, que reconoció que el Ayuntamiento tuvo que rebajar las pretensiones iniciales que tenía de cara al precio de la nave "y adaptarnos a las condiciones del mercado".
Una capacidad de adaptarse que también le piden a Sepes, Entidad Estatal de Suelo. Y es que el desarrollo de Argame aún no se ha completado. Aún hay 10 parcelas sin vender, que son precisamente propiedad de Sepes. "Pensamos que van a tener que flexibilizar las condiciones de venta de las parcelas, porque lo que no es lógico es que se mantengan unos baremos que se pedían antes de la crisis y que ahora ningún empresario va a poder cumplir", explicó García. El regidor indicó que "cuando el polígono industrial de Argame se desarrolló, había unas previsiones que no se cumplieron, y que a día de hoy no encajan, y por eso vamos a intentar negociar para que Sepes pueda rebajar sus pretensiones y facilitar el desembarco de nuevas empresas inversoras y generadoras de empleo".
El polígono de Argame se construyó hace algo más de una década. Al albor de los fondos mineros, muchas empresas se interesaron en ocupar terrenos en esta área industrial, muy bien comunicado, ya que a escasos cinco kilómetros tiene la salida para la Autovía A-66. Muchas de aquellas compañías se vieron sorprendidas por la crisis, y o bien no llegaron a desarrollar sus iniciativas, o tuvieron que cerrar. Pero a base de trabajo, el área industrial ha ido reocupándose con la llegada de nuevas iniciativas empresariales.
