Otra "carnicería" de los lobos en los montes de Mieres. Un grupo de cánidos salvajes, presuntamente -no ha sido confirmado por el Principado- comieron ayer una oveja y dos corderos. El propietario de la ganadería es Jesús García, presidente de la Asociación de Ganaderos Afectados por el Llobu (Agall) en la comarca del Caudal y miembro de la directiva de Asturias Ganaderas: "Tienen que controlar la población ya, tienen que quitárnoslos de aquí".
"Aquí" es el valle de Lloreo, una de las zonas de Mieres más afectada por los ataques de lobos. "En los últimos meses han comido terneros, potros, de todo", clamó el ganadero. El productor se encontró con una auténtica "carnicería" en la mañana de ayer, cuando acudió a atender al ganado. "Se habían comido a una oveja, un cordero y otro que tengo desaparecido", afirmó.
Llama la atención sobre el "atrevimiento" de los cánidos. "La finca está protegida por dos mastines. Esto significa que entraron, al menos, tres o cuatro lobos". Hay una "importante" población de cánidos salvajes en la zona, aseguró. A pesar de que siempre ha sido muy beligerante con el Principado, aseguró que prefiere que el guarda no visite en esta ocasión su finca para dar parte de lo ocurrido: "En plena cuarentena, creo que vale más la protección de la salud de una persona que la pérdida de estos animales", concluyó.
