La fiebre del Gordo de Navidad multiplica los pedidos de lotería y desborda al Atletismo Mieres

La ilusión es un sentimiento que muchas veces rebosa incluso todo abismo de racionalidad. La probabilidad que te toque el Gordo de la Navidad jugando un número concreto es de una entre cien mil. Es decir, un 0.001 por ciento, El Club Atletismo Mieres convirtió el año pasado ese exiguo margen de éxito en 137 millones de euros . A falta de aún más de dos meses para que el bombo vuelva a girar, son cientos y cientos las personas que se han puesto en contacto con la entidad deportiva para solicitar participaciones. Confían en que ese 0,001 por ciento vuelva a ser suficiente.

El Club Atletismo Mieres no ha tenido tiempo de poner a la venta los talonarios de la Lotería de Navidad que este año encargaron. «En un par de días los comprometimos todos», explican los responsables de la entidad. Ante la avalancha de peticiones, ha solicitado más talonarios, hasta sumar 130: «Está todo reservado y lo poco que queda se asignará en la próxima asamblea mediante un prorrateo ». En el club ya esperaban una alta demanda, pero aún así reconocen estar sorprendidos: «Nos para por la calle gente que no conocemos de nada y nos preguntan si tenemos lotería. Es una locura».

Adquirir participaciones del número que juega el Club Atletismo Mieres es a estas alturas una tarea casi imposible. «Hay quien nos señala que deberíamos haber cogido un número entero, pero nosotros somos un club deportivo y no una administración de lotería. De mano no sabíamos que demanda habría». En la ciudad aún está alta la fiebre por la lotería que se extendió tras conocerse que el Gordo había infectado de millones al concejo.

La probabilidad

Si repartir del Gordo una vez fue un feliz golpe de suerte, repetir por segunda vez parece tarea casi mágica. Pero la gente confía en que se mantenga el hechizo. En realidad, si se buscan con lupa, hay factores que invitan a un muy prudente optimismo. Para empezar, las posibilidades de que toque dos veces seguidas son idénticas a las que toque por primera vez. Este año la entidad mierense vuelve a contar de partida con un 0,001 por ciento de probabilidades de alzarse con el Gordo. Además, hay precedentes que dejan un resquicio abiertos a la esperanza. En sus más de doscientos de años de historia el popular sorteo navideño ha desafiado en varias ocasiones los cálculos de probabilidades. El número 20297 fue agraciado en 1903 y volvió a serlo una segunda vez. Ahora bien, hubo que esperar más de un siglo, ya que el bombo lo volvió a escupir cargado de millones en 2006. No se trata de un hecho aislado. Hay otro caso. En 1978 el número afortunado fue el 15640, que ya había sido cantado como el primer premio en otra ocasión. En concreto, 22 años antes.

Suscríbete para seguir leyendo