Aprobada la modificación del proyecto de Reicastro, en trámite desde 2017
Hunosa ya tiene el camino despejado para poder comercializar el mayor polígono sin uso de Mieres
Estado actual del polígono de Reicastro, con obras de adecuación. | D. M. / D. Montañés
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Mieres acaba de aprobar el proyecto de gestión del polígono industrial de Reicastro. Se trata del último trámite administrativo necesario para solucionar definitivamente los problemas de ordenamiento que surgieron en 2017 por un conflicto con la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y que afectaba a la titularidad de un franja de suelo. Con esta gestión, Hunosa, propietario de la parcela, tiene luz verde para cerrar acuerdos con empresas que pudieran estar interesadas en instalarse en la antigua escombrera.
"Hemos intentado dar la máxima celeridad a la aprobación definitiva del proyecto de gestión para facilitar que Hunosa pueda comercializar los terrenos", destacó la concejal responsables del área de Desarrollo Urbano, Marta Jiménez.
La tramitación de proyecto definitivo de Reicastro era el último paso necesario del procedimiento que Hunosa anunció en 2017 para arreglar los problemas de ordenamiento. Seis años ha durado el trámite. Por entonces, además, los terrenos ya llevaban cinco años urbanizados, tras una inversión de 4.5 millones.
El polígono de Reicastro es actualmente la mayor bolsa de suelo para empresas de la comarca del Caudal: cuenta con 130.000 metros cuadrados. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico presentó en su momento una alegación en el periodo de información pública al documento de gestión del polígono elaborado por Hunosa y aprobado inicialmente, en mayo de 2017, por el Ayuntamiento de Mieres. Era la última fase del desarrollo del polígono para ponerlo en servicio para proyectos empresariales para la reactivación de las Cuencas. Hunosa tuvo que modificar el proyecto, que finalmente está libre de trabas.
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