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Luis Alonso Vega

Desde la Meseta

Luis Alonso-Vega

Arrugados

La tristeza por los amigos y familiares que se van marchando

La pandemia disgustó y causó muchas tristezas a familias y amigos. Pero no solo el covid fue el causante de contagios y muertes, porque otras enfermedades fueron motivo de fallecimientos de gente de nuestro alrededor. Por ejemplo, hoy me notificaron la muerte de una prima que vivía en Viena desde hace unos años. Asturiana ella, viuda de un austriaco ejemplar al que siempre le gustaba veranear en Asturias.

Hace unos días fallecía un antiguo compañero de estudios, Isidro, con el que mantuve una excelente amistad durante años. Sin olvidar a Jaime, empleado del Banco Popular, con el cual no tuve solo amistad, sino también con toda su familia. Y poco tiempo antes la muerte de un antiguo profesor, con el que tuve una gran amistad, Florentino Braña, que atendió a una serie de recomendados que le solicité.

Un compañero del Instituto Alfonso II, que después se vino para Madrid, al trasladarme yo, igualmente, para esta capital de España. Retomamos la amistad hasta que, al cabo de unos años, él retornó para Oviedo, donde ya no pudo disfrutar al fallecer en pocos meses, tanto él como su mujer. José Luis Mendoza y Tere.

Son unos pocos a los que me refiero hoy, que no cabrían en una página si quisiera recordarme de todos los fallecimientos que fueron motivo de disgusto y tristeza, pero su familia y el resto de amigos sabrán perdonarme el lapsus.

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