Gijón, V. R.
«Estoy un poco cargado, pero de aquí al sábado estaré a pleno rendimiento». Kike Mateo pronunció al término del entrenamiento de ayer las palabras que todo el sportinguismo quería oír. Tanto el murciano como Diego Castro se entrenaron ayer sin problemas y el sábado serán de la partida. Kike Mateo explicó que «sufrí bastante en el partido del sábado y la verdad es que mis isquiotibiales están un poco cargados, pero, nada grave».
Sobre el encuentro del Heliodoro Rodríguez López, señaló que «será otro partido muy importante, como los seis que quedan, tenemos que sumar el mayor número de puntos posible». El discurso parece repetido durante las últimas semanas, pero el murciano insiste en que «no va a haber rivales fáciles, porque cualquier partido se te puede complicar». No conviene bajar la guardia, porque «en cualquier momento puede pinchar cualquiera, porque todo está muy igualado».
En particular, las miradas se centran en el choque del Carranza, donde Kike Mateo concluye que «espero que la Real se encuentre un partido la mitad de complicado que el que nos encontramos nosotros, y que el Cádiz nos eche una mano y puntúe».
