Emiliano Armenteros principal objetivo del director deportivo del Sporting, Emilio de Dios, para reforzar la banda izquierda está a un paso de convertirse en nuevo jugador del Rayo Vallecano. A pesar de encontrarse en pleno proceso concursal, el conjunto madrileño es el que más empeño ha puesto para conseguir los servicios del extremo argentino, que jugó un papel determinante en el ascenso conseguido la temporada pasada. Armenteros se encuentra lesionado en estos momentos y se calcula que no podrá jugar de nuevo hasta finales del mes de febrero, pero la del Rayo es una apuesta de futuro.

Para cerrar la operación falta el visto bueno de los administradores concursales, aunque en Vallecas se da por hecha. El Rayo se hará cargo de una buena parte de la ficha de esta temporada del futbolista y el Sevilla recibirá una prima de 300.000 euros si el conjunto madrileño logra la permanencia. En principio se trata de una cesión, pero Armenteros termina su contrato con el Sevilla el próximo 30 de junio, por lo que ya puede legalmente firmar un contrato con el Rayo para las próximas temporadas.

El fichaje de este futbolista ha sido la prueba que mejor evidencia la grieta abierta entre los técnicos rojiblancos y los dirigentes del club. Manuel Preciado y Emilio de Dios consideran prioritario el fichaje de este futbolista, por el que el Sporting pujó el pasado verano con decisión y más tímidamente en el mercado de invierno, ya que el consejo de administración no comparte ese fervor por el extremo. Los términos en los que va a cerrarse la operación parecen perfectamente asumibles por el Sporting, que ha pagado cantidades muy superiores por el fichaje de Damián Suárez o por la cesión de André Castro.

Por otro lado, el lateral derecho de la Juventus Motta, que fue ofrecido al Sporting y desechado por los técnicos, está a un paso de comprometerse con el Zaragoza.

En el vestuario del Sporting hay un futbolista que está despertando mucho interés. Se trata de Botía, al que siguen de cerca Atlético de Madrid, Sevilla y Valencia. El entrenador del conjunto che, Unai Emery, y el director deportivo, Braulio Vázquez, estuvieron en El Madrigal viendo al central en vivo. Botía tiene dos temporadas más de contrato con el Sporting, pero el Barcelona puede repescarlo por 2,5 millones a final de temporada.