Los versos de la salida del Descenso del Sella volvieron a erizar los pelos de más de uno de los asistentes al homenaje que le sería tributado ayer a Dionisio de la Huerta, con motivo de cumplirse el vigésimo aniversario del fallecimiento del fundador e impulsor de la tradicional Fiesta de las Piragüas de Asturias. En ésta oportunidad, el encargado de pregonar esos emotivos versos -"Guarde el público silencio/ y escuche nuestra palabra,??."- fue el presidente del Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella, José Antonio Modino, ante medio centenar de personas, al pie del busto que inmortaliza la figura del ideólogo del Sella, localizado en las inmediaciones de la popular plaza del Cañón, en la villa de Arriondas.

Una vez entonado el "Asturias Patria Querida", José Antonio Modino y la secretaria del CODIS, Patri Llamedo, colocaron el típico collar de flores de la Fiesta de las Piragüas en el pétreo busto de Dionisio de la Huerta, donde también reposaba un ramo de flores que había depositado con anterioridad el Ayuntamiento de Parres. Posteriormente, todos los asistentes al sencillo homenaje se dirigieron hasta el puente que lleva el nombre del inolvidable Emilio Llamedo Olivera, otro de los más grandes de la historia sellera, para arrojar algunas docenas de claveles a las aguas del mítico río del Oriente de Asturias.