Borja Sánchez fue una de las piezas clave en el ascenso del Vetusta esta temporada. El jugador, cedido por el Madrid, hizo una apuesta decidida por el club azul a pesar de tener ofertas de clubes de Segunda B (Mirandés y Recreativo fueron los equipos que más interés mostraron en contratarle). La presencia de Javi Rozada en el banquillo, que ya le había dirigido en cadetes en El Requexón, fue clave para su llegada.

Ahora, el Oviedo espera un desarrollo similar de acontecimientos. A Borja aún le queda otro año de contrato en el Madrid, pero negocia con el club blanco una salida para seguir vestido de azul. Al centrocampista aún le resta un año de categoría sub-23 y con el Vetusta en Segunda B se abre un escaparate interesante para él. El Madrid podría facilitar su salida aunque en casos como el de Borja el club blanco suele reservarse una opción de recompra o un porcentaje de ganancia sobre una hipotética futura venta.

La continuidad de Borja Sánchez le daría a Rozada un plus de talento en el centro del campo. El entrenador lo empleó en la última campaña tanto en la banda izquierda como en la media punta.