El miércoles volverá a sentarse en uno de los banquillos del Palacio de Deportes de Gijón para dirigir a su equipo, el Clavijo de La Rioja. Lo hará diez años después y, en esta ocasión, como visitante. Jenaro Díaz ha sido el último entrenador del Gijón Baloncesto, una etapa que recuerda como "un año duro en el que no cobramos, con unos jugadores que lo pasaron mal, pero que fueron comprometidos y lograron el objetivo de salvar la categoría", expone. Un hecho que, apenas dos meses después, no fue suficiente para mantener el baloncesto profesional en la ciudad.

Por su cabeza pasan muchas personas, desde su segundo entrenador por entonces Diego Tobalina, la fisioterapeuta Jéssica y jugadores como Jeff Bonds. Por ello, resalta que "fue un año que me cambió la vida y con el que evolucioné". Desde entonces, ha disfrutado de una etapa de seis años en el cuerpo técnico del Khimki ruso con 250 partidos de Euroliga y su experiencia en la selección española, entre otros proyectos como el que ahora encabeza en el Clavijo. El destino, le devuelve a Gijón por unas horas para enfrentarse al Teslacard.

Un proyecto que para Jenaro Díaz "es para poner una pancarta en grande que ponga gracias en letras mayúsculas porque Nacho Galán ha reflotado un equipo. Creo que cada persona que vaya al Palacio debe de tener un respeto total y se tienen que acordar de los años de baloncesto profesional que no hubo en Gijón y ser agradecidos". El ovetense no piensa en regresar en el futuro a su segunda casa, pero sí le atraería "volver al San Ignacio, allí empecé y eso sí me motivaría".

Jenaro Díaz ha seguido las evoluciones de su rival del miércoles. Un equipo al que ha visto "muy bien, pero sin continuidad". Ahí encuentra el ovetense la clave de la falta de victorias de los gijoneses, con un balance de un triunfo y seis derrotas en su casillero. "Cuando se les apaga la luz, se les apaga durante mucho tiempo, hay que buscar el equilibrio, si ganan dos partidos resurgirán, pero no deben de dejar pasar el tiempo", advierte.

"Ojalá reaccionen ya"

Es más, el técnico ovetense desea a los gijoneses que "reaccionen ya" e incluso asegura que "si es contra nosotros y nos sirve para crecer no pasaría nada, si ganan de forma merecida". Jenaro resalta la presencia de "dos o tres jugadores que me gustan" en el Teslacard y ensalza a Saúl Blanco, que "está haciendo jugar a los demás". El miércoles, a las 20 horas, será el momento en el que Jenaro Díaz, Gijón y el Palacio de Deportes se reencuentren diez años después para volver a disfrutar de la magia del baloncesto.