En su primer partido tras ser ratificado como entrenador del Madrid, el "efecto Solari" se diluyó en Eibar. Pesó más el "efecto Ipurúa", un campo incómodo para los madridistas, aunque siempre salieran airosos. Ayer no, tanto por méritos del Eibar, agresivo y punzante desde el minuto 1, como por dejadez del equipo blanco, como denunció Sergio Ramos tras el partido: "Si no igualas la intensidad del rival, te conviertes en un equipo vulgar".

Un remate de Kike García al poste en el minuto 2 anunció lo que le esperaba al Madrid en Ipurúa. Los dos equipos salieron con la intención de presionar al rival muy arriba, lo que deparó un primer cuarto de hora con ocasiones en las dos áreas. Al susto de Courtois siguió el de Riesgo, que vio como el asturiano Cote sacaba encima de la raya un sutil toque de Benzema tras entrada por la izquierda de Asensio, titular ayer en detrimento de Isco, que sólo salió al final.

De un córner a favor del Madrid salió la supersónica contra que, llevada por Cucurella y Orellana, acabó con el 1-0, con suspense porque fue necesario que el VAR confirmase la legalidad del gol. Era la primera vez que Solari se veía por detrás en el marcador y el Madrid no supo cómo resolverlo. El Eibar se afianzó, sin necesidad de atrincherarse en su área, y castigó continuamente por la banda izquierda. Por ahí llegó el 2-0, en otra incursión de Cucurella. El canterano cedido por el Barça se confirmó como la figura del partido cuatro minutos después, cuando asistió para el tercer gol, de Kike García.

Sergio Ramos negó ayer que incumpliera las normas antidopaje tras la filtración de Football Leaks: "Tomaré con mi equipo legal las medidas oportunas ante esta gente que intenta manchar mi imagen. Nunca he incumplido ninguna norma y habré pasado más de 300 controles", dijo en Ipurúa. El sevillano denunció un intento de extorsión: "Nos avisaron hace un mes y medio de que tenían esa noticia e intentaron sobornarnos con dinero y otras cosas", afirmó. "Llevo mucho tiempo en la cresta de la ola y disfruto con mi tabla, y al que le joda, que se meta en agua", añadió. Ramos aclaró en un comunicado posterior que la sustancia es un antiinflamatorio, que le administró el club para un problema en un hombro y que "la cuestión quedó aclarada y resuelta".