Abu Dabi, N. L.

El Real Madrid buscará hoy en Abu Dabi (17.30, La 1) su tercer título consecutivo en el Mundial de Clubes, en un partido donde será claro favorito contra el anfitrión Al Ain, la sorpresa del torneo, que llega al partido de más prestigio de su historia con gran motivación. La ilusión desbordada, el deseo de pelea y la fuerza mental fueron claves para que el Al Ain ganara al River en semifinales. El Madrid, que llegó a Emiratos en un mar de dudas por su imagen de los últimos partidos, calmó los ánimos el miércoles con su victoria en semifinales sobre el Kashima Antlers y ahora tiene ante sí la ocasión de revalidar su hegemonía mundial.

El peligro de este partido está en que la victoria puede llegar a considerarse una obligación por la diferencia de calidad, mientras que una derrota desataría una crisis en el Santiago Bernabéu. "Me parece un torneo precioso. Me gusta la idea de juntar a los campeones de las distintas confederaciones y disputar un campeonato del mundo", afirmó el técnico Solari, que lo ganó como jugador en su formato de Copa Intercontinental en 2002.

Su principal contratiempo para la final es la baja por lesión de Asensio, que recayó el miércoles de sus problemas musculares y que ayer se le realizaron pruebas confirmándose que sufre una rotura muscular en el recto femoral de la pierna derecha, que le tendrá en torno a un mes de baja.

Frente a ellos estará un Al Ain que ya hizo historia al convertirse en el primer equipo de los Emiratos Arabes Unidos en jugar una final del Mundial de Clubes. Supera la actuación del año pasado del Al Jazira, que cayó en semifinales precisamente ante el Madrid. Aquel equipo emiratí plantó batalla a los españoles, que tuvieron que ganar con un gol ya en el minuto 81.