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Abelardo: "He sido víctima de una extorsión por la que ya he declarado"

El técnico gijonés pide "respeto" para su familia tras pagar 30.000 euros a la trama de chantajes sexuales de Toño, jugador del Levante

El entrenador asturiano Abelardo Fernández J. RUS

"He sido víctima de una extorsión. He denunciado y he declarado en Teruel como afectado". Así confirmó ayer Abelardo Fernández, entrenador gijonés del Alavés, el chantaje al que fue sometido por la banda de extorsionadores a la que se vincula a Toño, jugador del Levante, que ha estado en prisión preventiva por este caso. La banda, desarticulada por la Guardia Civil en la operación Lubido-Hezurra, se dedicaba a organizar falsos encuentros con prostitutas a través de una conocida página web de contactos. Estos encuentros no llegaban a producirse, pero posteriormente los criminales reclamaban el dinero bajo la amenaza de informar a los familiares y amigos de las víctimas. Incluso llegaron a amenazar de muerte a los familiares de las víctimas.

Según el periódico "Levante-EMV", del mismo grupo editorial que LA NUEVA ESPAÑA, Abelardo habría realizado un pago de 30.000 euros mediante dos transferencias a una de las "mulas" de los criminales, es decir, personas que ofrecían sus cuentas bancarias para depositar el dinero. Desde el entorno del exjugador y exentrenador del Sporting, afirman que la banda contactó en un primer momento con Abelardo con el objetivo de ayudar a un enfermo de cáncer.

"Estoy aquí para defender mi honor y el de mi familia. Esto es una cuestión de ámbito privado. Pido respeto", indicó el asturiano durante una breve comparecencia ayer por la tarde en la que leyó un comunicado. Abelardo no aclaró cómo cayó en las redes de los criminales. Y no lo hizo, según explicó, porque "las diligencias se encuentran bajo secreto de sumario. Desconozco el contenido de las mismas y manifiesto mi extrañeza y disconformidad con la información que se ha conocido hoy (por ayer)".

En cualquier caso, el exentrenador del Sporting sólo sería una de las 40 víctimas de esta banda, que la Guardia Civil ha desarticulado bajo lo que se conoce como la operación Lubido-Hezurra. No se descarta que haya más casos, que pude que se vayan conociendo próximamente. Tampoco que aumente el número de detenidos, que ya va por 14, más cinco investigados.

A estos criminales se les acusa de delitos de amenazas, blanqueo de capitales, tráfico de drogas, usurpación de estado civil y falsedad documental. Su base de operaciones estaba en Valencia, pero tenían una estructura profesional que les permitía trabajar en todo el territorio nacional.

Solo así se explica la enorme ristra de afectados por toda la geografía nacional. Hay denuncias en Teruel, Huesca, Zaragoza, Álava, Navarra, Castellón, Valencia, Salamanca, Murcia, Toledo, Jaén, Huelva, Albacete y Cantabria.

La forma de actuar de la banda de la que ha sido víctima el Pitu Abelardo era relativamente sencilla. Los criminales publicaban anuncios de prostitutas en una conocida web de contactos en la que no es necesario estar registrado. En realidad, cualquiera puede publicar un anuncio allí.

Los clientes contrataban un servicio que nunca llegaba a producirse. Lo que sí había después eran amenazas, algunas incluso de muerte, para cobrar el servicio bajo el chantaje de revelar a la familia de las víctimas el falso encuentro. Los afectados depositaban la suma en las cuentas de las "mulas", y posteriormente el dinero era blanqueado. Ahí es donde entra Toño, jugador del Levante, que supuestamente habría ayudado a la banda a blanquear el dinero de los chantajes, que se calcula que alcanzan un total de 500.000 euros, según los investigadores.

Las primeras denuncias datan de marzo de 2018. La Guardia Civil comenzó con las primeras detenciones el siete de febrero. Al día siguiente, se detuvo a más sospechosos en Teruel, entre los que se encontraba el defensa granota.

Toño pasó 21 días en prisión provisional, acusado de blanquear el dinero de la banda, por su relación con I. B. O., alias "Salva", un varón de 26 años, vecino de Valencia, conocido de los bares de copas de la ciudad del Turia, y cabecilla de la red de extorsión junto a M. F. M., alias "Eric".

Toño salió de la cárcel el primero de marzo tras 21 días entre rejas. El defensa aseguró, tras volver a entrenar con el Levante, que "soy inocente. Quizás he confiado mucho en algunas personas, pero de ahí a suponer que pertenezco a una organización criminal y que me dedico al blanqueo de capitales, hay un mundo".

La casualidad del calendario liguero quiso que el Levante se enfrentara el pasado 11 de febrero, con Toño ya entre rejas, al Alavés del Pitu Abelardo. La victoria cayó del lado del equipo vitoriano por dos goles a cero.

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