El Oviedo BF tiene en su mano una nueva participación en la fase de ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola de balonmano. A falta de tres jornadas es líder de la División de Honor Plata, con dos partidos en su cancha del Florida Arena. El entrenador del equipo ovetense, Manolo Díaz, está convencido de que sus jugadoras estarán a la altura y pide algo más: "Me gustaría que se llenasen las gradas porque es fundamental tener un poco más de apoyo".
En vísperas de recibir al Hand Vall Valladolid (sábado, 20 horas), Manolo Díaz muestra su perfil más reivindicativo. "El esfuerzo que están haciendo las chicas merece un poco más de apoyo del que estamos teniendo", dice para resaltar el mérito de un equipo que, tras 23 jornadas, encabeza la clasificación. El objetivo es amarrar uno de los dos primeros puestos para disputar la fase de ascenso.
Los dos primeros de los cuatro grupos de la División de Honor Plata se cruzarán en una eliminatoria de la que saldrán los cuatro equipos que lucharán por la única plaza de ascenso a la máxima categoría, en un fin de semana en una sede por designar. En caso de llegar a esa última fase, el Oviedo BF descarta entrar en la puja para jugar como local por cuestiones económicas.
Los dos próximos rivales del Oviedo BF están situados en la zona media de la tabla. El Valladolid es sexto, con 27 puntos, mientras que el Rodavigo marcha octavo con 25, aunque en las últimas jornadas ha protagonizado alguna sorpresa. Si gana estos dos partidos, al equipo ovetense le bastará un empate en la última jornada contra el Cleba para asegurar la fase de ascenso, ya que en la ida en León las de Manolo Díaz ganaron 22-26.
El Oviedo BF quiere repetir el éxito de 2015, cuando logró el ascenso, aunque ahora resulte más complicado porque sólo hay en juego una plaza por la reducción de la División de Honor.
