Al asturiano Jorge Lorenzo (Avilés, 1985) le está costando asimilar todo lo que está viviendo desde que el domingo la selección española de baloncesto, de la que es entrenador ayudante, ganó el campeonato del mundo al derrotar (95-75) a Argentina en la final disputada en Pekín. "No soy consciente muy bien de todo lo que esta pasando, he vivido una experiencia que es historia del baloncesto español y formar parte de ella es un orgullo que voy a llevar siempre. Está siendo todo espectacular", decía a este periódico durante el trayecto de vuelta a Madrid.
Lorenzo ha ocupado un lugar muy concreto y de enorme importancia dentro del "staff" técnico de la selección. "Mi labor ha sido un poco la de coordinar el trabajo que hacíamos todos los entrenadores para facilitárselo a Sergio (Scariolo) y después, en la competición, he hecho el trabajo de vídeo para los jugadores y para el entrenador", explica el propio técnico avilesino. Para hacerlo ha usado un programa informático creado por él mismo: "Mi función era también la utilización de una herramienta que he creado yo para analizar el rendimiento táctico de nuestros sistemas y de los del rival. Se llama 'basket touch analytics'. Esta herramienta quiero comercializarla y sacarla a la venta para otros equipos", añadía. Su función durante los partidos era "hacer el análisis en directo para pasárselo a Sergio en el descanso y que pudiese utilizar esa información en la charla con los jugadores. El trabajo ha sido muy interesante".
El asturiano es un apasionado del baloncesto y desde pequeño quiso formar parte de ese mundo: "Empecé en el Avilés Sur, algunos colegios de Avilés, como el Marcos de Torniello o el Palacio Valdés, y después estuvo en el ADBA. Más tarde creamos un club que ha cumplido diez años, el Innobasket. También estuve un periodo entrenando en Gijón y en Mieres y desde el año pasado entreno en Madrid, antes en Torrejón y ahora en Zentro Madrid, donde voy a llevar un equipo de Primera Nacional y ser ayudante en el de EBA".
Sus conocimientos le llevaron a ser captado por la Federación Española, donde lleva varios años trabajando: "Con la Federación llevo colaborando ocho o nueve años, empecé en lo que se denominaba detección de talentos, con jugadores de 12 años, y después fui pasando por varias selecciones de formación, hasta la sub-19, y ahora llevo dos años con Sergio en las ventanas (los partidos clasificatorios para el Mundial)", explica.
Ahora le toca disfrutar de una celebración que comenzó muy bien la misma noche del domingo: "Estuvimos en el hotel con todas las familias, con los jugadores y patrocinadores, fue una noche para recordar momentos del campeonato y de la preparación. Fue muy bonito para poner punto final a nuestra estancia allí".
