Marino y Celta B se repartieron los puntos en un partido en el que los porteros impidieron que se ampliara el marcador. Rosic salvó a los vigueses en el primer período y Javi Porrón estuvo providencial en los últimos minutos para mantener el empate.

El filial celtista tuvo la primera oportunidad antes de cumplirse el minuto 1, tras una internada de Javi Gómez, que se plantó a Porrón, al que no pudo superar. Los luanquinos replicaron con un disparo de Luis Morán al que respondió Rosic con una buena intervención y poco más tarde el guardameta serbio volvió a mostarse acertado al desviar un remate de cabeza cercano de Míkel.

El Celta B llevaba el peso del encuentro y llegaba con facilidad al área local, pero sin acierto en los metros finales. Los de Oli, por contra, se acercaban con menos frecuencia, pero dispusieron de dos oportunidades que abortó Rosic: a los 31 minutos desvió a córner un disparo raso de David González desde el borde del área, y casi a continuación detuvo un remate de cabeza a bocajarro de Saha. Justo antes del descanso, los vigueses volvieron a disponer de una buena oportunidad, tras una internada de Carreira, pero Jacobo no llegó al remate.

El Marino se adelantó al cuarto de hora de la segunda parte, tras un derribo de Yeboah a Luis Morán en el área, un penalti transformado por Álex Arias con su seguridad habitual. En ese momento comenzaron los infortunios para los locales, ya que Trabanco tuvo que abandonar el campo por una lesión muscular y su sustituto, Miguel Prado, cometió penalti sobre Yeboah en su primera jugada. Moha estableció el 1-1 pese a la buena estirada de Javi Porrón.

El Celta B se creció con el empate y acorraló a un Marino que perdió la iniciativa. Yeboah, tras una buena acción individual, cruzó demasiado su disparo y poco después el recién incorporado Manu Justo se plantó ante Porrón, que con un rápida salida evitó el gol. La ocasión más clara para los de Oli en el tramo final llegó a los 85 minutos, tras un zurdazo de Lora desde el borde del área que se marchó junto al larguero. Y en el añadido, Javi Porrón completó su gran partido al rechazar un disparo de Manu Justo.