La sorpresa llegó al final, nada más terminar la mesa redonda que tuvo lugar en la Fábrica de La Vega, cuando Carlos Sainz se dirigía al vehículo que le esperaba en la puerta del recinto. En ese momento, Fernando Díaz, del restaurante La Pérgola, de Sevares (Piloña), lugar en el que pasó mucho tiempo entrenando el dos veces campeón del Mundo de rallies, regaló a Carlos Sainz -en la imagen- un escanciador para que pueda disfrutar de una botella de sidra allá donde se encuentre.