El entrenador del Real Avilés, Abraham Albarrán, asegura que, pese a que la actual propiedad del club se ha desvinculado de José María Tejero, se la sigue asociando con él, lo que está lastrando su recuperación. "La sombra que rodeó al club está dificultando que se capte publicidad, por ejemplo", apunta Abraham, que desde su condición de entrenador del primer equipo analizó aspectos deportivos e institucionales.

En este sentido, pidió el regreso de los aficionados que abandonaron al equipo por su hartazgo de la gestión de Tejero: "Si se fueron por Tejero, ¿por qué no vuelven ahora que no está?". El técnico mostró además su indignación con los "insultos" en las redes sociales que dijo recibir tanto él como el club de aficionados del Stadium. "Igual que ellos lo desearon de mi club, y desean ahora que no ascendamos, yo deseo que bajen y que desaparezcan".

En lo que respecta a la marcha deportiva, Abraham aseguró que el equipo va "bien encaminado" en su objetivo de dar el salto de categoría y que mantiene su idea de reforzarse de aquí a que se cierre el mercado de invierno. "Va a haber más altas y más bajas", señaló, para subrayar que agunas de las rescisiones efectuadas se deben a problemas de comportamiento y a faltas de respeto hacia miembros del cuerpo técnico.