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Nairo revive en el Principado: El ciclista colombiano puso fin en Asturias a 400 días sin victorias

Arriba, Nairo Quintana descorcha el champán para celebrar su triunfo final en esta edición de la Vuelta a Asturias. En la imagen de la izquierda, Dani Navarro, en el podio de la ronda asturiana. | Miki López

Tras cuatrocientos días sin triunfos, Nairo Quintana resucitó en la Vuelta a Asturias, donde logró la ansiada victoria en la primera etapa, en Pola de Lena, tras un ataque magistral, para luego defenderse bien de la ofensiva total del equipo Movistar. Con la experiencia que le dan sus 31 años y tras haber ganado Vuelta a España y Giro de Italia y haber conseguido podios en el Tour de Francia, ha sido en Asturias, en una ronda que ya se llevó en 2017, donde ha vivido su resurrección.

Quintana tiene la grandeza de los campeones, la que permite sobreponerse a las dificultades. Tras dos operaciones de rodilla en la parte final de la pasada temporada, supo aguantar una dura rehabilitación para volver a la senda del triunfo. “Fue complicada la recuperación, pero ahora me veo bien y este triunfo ante buenos rivales me da moral para afrontar el reto del Tour de Francia”, argumenta el colombiano, que matiza que “al haber estado antes en Movistar sé cómo afrontan las carreras y me valió para defenderme luego, en las etapas de Cangas de Narcea y en la dura del Naranco”.

El favor es mutuo. El triunfo de Quintana, componente del equipo Arkea, da prestigio a la Vuelta a Asturias, como también se lo otorga el que estuviera escoltado en el podio por Antonio Pedrero (Movistar) y por el francés Pierre Latour (Total Energie), éste experimentado en las grandes pruebas internacionales y ganador en la etapa final del Naranco, cima José Manuel Fuente “El Tarangu”.

Nairo revive en el Principado

Siempre se mantuvo que la Vuelta a Asturias es una gran preparación para el Tour de Francia y para el Giro de Italia, como demostraron en su día campeones de la talla de Miguel Indurain, Perico Delgado, Raúl Alcalá o Gert Jan Theunisse, entre otros. Que la ronda del Principado vuelva a tomar ese cariz sería el mejor aval para el regreso a la carrera de los grandes corredores.

Respecto a la participación de corredores del Principado, solamente hubo dos, ambos en el equipo Burgos BH. El gijonés Dani Navarro, tras el fichaje a última hora por el equipo de Julio Izquierdo, llegó a Asturias sin apenas probarse en carreras. Se le notó corto de preparación, a lo que sumó que en la primera jornada se vio cortado antes de la subida a Carabanzo debido a una caída. No pudo estar adelante. Fue de menos a más: se defendió mucho mejor subiendo El Acebo, donde se cortó en el alto cuando Quintana tiraba para neutralizar ofensivas. Y ya en el Naranco se notó la mejoría.

Por su parte, el debutante Pelayo Sánchez pasó su calvario al estar dos semanas parado por las habituales alergias, demostrando tener orgullo, y en la etapa final del Naranco ya fue más escalador. Esto debe darle moral en su debut en la tierra.

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