La sexta jornada del subgrupo A y quinta del B volvió a quedar coja por el aplazamiento de los choques que debían celebrarse en Santa Catalina, entre Praviano y Vallobín, y El Bayu, entre el Siero y el Titánico, y al igual que la anterior se celebró sin público.
En el A hubo mucha igualdad en todos los encuentros, ya que ninguno se saldó por más de un gol de diferencia. Ni siquiera el Caudal ante el recién ascendido Avilés Stadium. El choque más interesante estaba en el Suárez Puerta, Avilés-Llanera, dos equipos que aspiran a jugar los play-off por el cambio de categoría y que al final se llevaron los locales pese a comenzar por detrás en el marcador.
Este grupo está liderado por Ceares y Caudal, que al igual que los avilesinos no conocen la derrota. Por contra, Lenense y Praviano aún no estrenaron su casillero, aunque el conjunto de Manolo es el único de los dos grupos que solo disputó un encuentro, y el de Alfonso lleva dos tras descansar esta jornada.
Más desigualdad hubo en el B, donde solo el Valdesoto-Tuilla se decidió por un gol de diferencia. Los de El Candín, después de dos derrotas consecutivas, ganaron en Villarea con más dificultades de las esperadas, ya que se impusieron por la mínima a un recién ascendido como el Valdesoto, que jugó 80 minutos con un hombre menos. Este grupo está liderado por San Martín y L’Entregu. El de Chiqui es el único que sumó todos los puntos disputados, mientras los de Marcos, aunque también tienen nueve, ya disputaron cuatro encuentros, de los que perdieron uno precisamente ante el San Martín, que esta pasada jornada fue el que venció con más holgura, al marcarle tres goles al Colunga en Santianes. El único que no aún no puntuó es el Colunga, que lleva tres derrotas.
Los dos derbis de la jornada finalizaron con victorias locales. En el gijonés, el Ceares, pese a comenzar perdiendo, logró remontar gracias a la colaboración de un defensa del Gijón Industrial. Y en el del Oriente, que a punto estuvo de no celebrarse, el Llanes venció al Urraca, en parte gracias a la buena actuación del juvenil Alberto, que marcó el gol de la tranquilidad para los llaniscos.
