Debemos ser optimistas ante el papel del tenis español en los Juegos Olímpicos. Por un lado tenemos al equipo masculino. Aunque ha tenido bajas importantes como las de Rafa Nadal y Roberto Bautista, números 3 y 16 del mundo respectivamente, España sigue teniendo un equipazo liderado por Pablo Carreño, que acaba de posicionarse como 11 del mundo, y por Davidovich, que está en pleno asentamiento entre los mejores del mundo (35 del ranking ATP) con tan solo 22 años. Y los dos lo han demostrado pasando esta primera ronda ganando a dos rivales complicados como son el americano Sandgren y el portugués Sousa, por 7-5 y 6-2 y 6-3 y 6-0 respectivamente.
Y luego está el mejor equipo femenino que podíamos tener, con Garbiñe Muguruza, 9 del mundo; Paula Badosa, la 29, y Sara Sorribes, 47. Las tres lideradas por nuestra Carla Suárez, que está haciendo un tenis espectacular.
En cuanto a Pablo Carreño, aunque parte como cabeza de serie número 6, tiene dos grandes rivales por su parte del cuadro, unos hipotéticos cuartos de final contra el actual 2 del mundo, el ruso Medvedev, y las semifinales contra el griego Tsitsipas. Será duro, pero con el actual estado de forma del gijonés y su gran motivación por participar en estos Juegos todo puede pasar.
En dobles, junto al malagueño Davidovich, y aunque con una primera ronda complicada, forman una gran dupla, que nos pueden sorprender a todos. A mí me gusta mucho esta pareja.
Pablo está jugando a un gran nivel, cuando se encuentra bien físicamente es muy, muy duro. A nivel técnico es un jugador muy equilibrado y completo, con un gran saque y un mejor resto. Es muy sólido desde el fondo y a la vez muy hábil, capaz de hacer rallys muy largos con una gran intensidad y sorprender con su gran revés paralelo, o alguna dejada, o incluso cerrando el punto en la red. A nivel mental, es un jugador tranquilo que siempre da muestras de una gran gestión de sus emociones.
Está siendo un gran año para Pablo. Se encuentra en un gran estado de forma, le están respetando las lesiones y tiene una gran confianza en su juego, y esto se le ha notado en el juego que ha desplegado en Hamburgo, sobre todo en los dos últimos partidos, sacando muy, bien pegando durísimo y con una gran confianza en su derecha. Aunque cambiar de tierra a rápida en tan pocos días no es la mejor preparación, creo que en este momento puede ganar a cualquiera tanto en individuales como en dobles.
