Oviedo / Gijón / Langreo,

A. ROZADA / L. DÍAZ

El expediente contra la Asociación de Fabricantes de Pan de Asturias sembró ayer preocupación e indignación en un gremio que, aseguran sus representantes, sobrevive con dificultad, enfrentándose cotidianamente variopintos problemas: los aumentos de costes de la harina (50 por ciento) o los carburantes, el incremento también de los gastos salariales, las dificultades para encontrar trabajadores o las prácticas comerciales de las cadenas de supermercados.

«Están dando palos de ciego ante la subida del IPC», señaló ayer Francisco González, presidente de la citada asociación. Según esa versión, la Administración estaría utilizando a la Comisión de Competencia e impulsando expedientes para desviar la atención y justificarse ante subidas de los precios que tienen explicaciones y orígenes distintos. Y añadió lo que se presenta como argumento principal contra el expediente: «No hay más que comprobar que el pan tiene un precio distinto en cada sitio». Durante el pasado año, los industriales abordaron incrementos que, según una aproximación, se movieron entre los 5 y los 15 céntimos, según los despachos y tipos de pan.

La gijonesa Lucía García, también directiva de la asociación y propietaria de una panadería en Gijón, descarta que haya unificación de pesos y precios entre los panaderos de la región. «Hubo años que no subió el pan porque no había necesidad, pero si suben las materias primas, es lógico que aumente también el precio», aseguró.

«Llevo dieciséis años trabajando en esta panadería y nunca se produjo una subida general; se pueden repercutir costes por el precio de los carburantes y los cereales, pero siempre de manera individual», dice la empresaria. Y añade: «Cada panadería de Gijón, Oviedo o Avilés maneja precios distintos».

José Manuel Álvarez es propietario de la panadería ecológica Madretierra, que elabora sus productos en Ladines (Sobrescobio). Fue la primera de este tipo de toda la región. Entiende perfectamente que el precio del pan haya subido porque «en los últimos seis meses la harina normal ha subido como en los 15 años anteriores que llevo trabajando». «Con subidas así», añadió, «es normal que el precio del producto suba». En su opinión, el alza del precio de los cereales ha sido causado, al menos en parte, por los intermediarios. «Hay quien ha especulado comprando y acaparando cereal, para luego venderlo al mejor postor», afirmó.