Gijón / Oviedo

El secretario general de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Alberto González, pronosticó ayer que habrá comercios y empresas que cerrarán durante la jornada de la huelga general, mañana, día 29, por temor a represalias por falta de comprensión y de respeto hacia la postura que libremente decida cada uno tomar ese día.

«Que quien quiera abrir pueda hacerlo de forma tranquila», pidió el «número dos» de la patronal asturiana. Y añadió: «Por desgracia, ya conocemos cuáles suelen ser las habituales formas de comportamiento en estos casos y nos tememos mucho que haya presiones e incluso chantajes de diverso tipo para que no se abran ni los comercios ni las empresas ese día». La dirección de FADE insistió ayer en que los servicios mínimos decretados por la Administración y en otros casos negociados con los sindicatos son insuficientes.

Los secretarios generales de UGT, CC OO y USO en Asturias, Justo Rodríguez Braga, Antonio Pino y Francisco Baragaño, respectivamente, denunciaron «coacciones» por parte de algunos empresarios para que los trabajadores no secunden la huelga general convocada por los sindicatos para mañana, miércoles, amenazándolos con el despido.