La entidad asturiana mantiene su plan con Cantabria y Extremadura

Cajastur y su banco filial CCM, junto con sus socios Caja Extremadura y Caja Cantabria, mantiene su proyecto de fusión, una vez que ayer se descartó continuar la integración con la caja alicantina por el elevado riesgo que CAM estaba incorporando a la operación. Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria -que eran los tres aliados iniciales del proyecto- mantienen vigentes las convocatorias de sus respectivas asambleas para el día 30 para ratificar de forma definitiva la segregación del 100% de activos y pasivos de las tres entidades en beneficio del banco que se constituyó el 28 de diciembre y que actuará como sociedad central de la fusión. La salida de CAM del proyecto supone empequeñecer el grupo resultante y renunciar a buena parte de la implantación nacional que iba a tener el banco, pero permitirá restablecer las ratios de solvencia. Es previsible -a expensas de lo que diga el Banco de España- que el nuevo grupo ya no necesite captar capital para cumplir los requisitos que impuso el Gobierno y que por ello tampoco precise dar entrada en su accionariado al fondo estatal FROB.