Madrid / Atenas, Efe / EP

La agencia Moody's recortó en la madrugada de ayer dos escalones la nota de solvencia de España, hasta «A3» desde «A1» y con perspectiva negativa.

Pese a ello, tanto España como Italia (otro de los países cuyo «rating» fue revisado a la baja por Moody's) lograron ayer emitir deuda a menor interés que en las subastas precedentes. La fuerte inyección de liquidez por el Banco Central Europeo (BCE) a las entidades financieras, y que éstas están destinando en buena medida a la compra de deuda pública a un interés superior al que tienen que pagar al BCE, está consiguiendo rebajar los tipos a los que se financian los Estados.

Por el contrario, y pese al abaratamiento de la colocación de títulos soberanos, la prima de riesgo española -el diferencial entre la rentabilidad del bono alemán a diez años y su equivalente español- subió y cerró en 338 puntos básicos, es decir, 5 más que la víspera. Aun así, la subida fue menor de lo que parecía al principio de la jornada, cuando, nada más saberse la rebaja de la calificación crediticia al Estado español, llegó a subir hasta los 339 puntos básicos (100 puntos básicos equivalente a un punto porcentual).

El Tesoro Público español logró ayer, pese a ello y por octava vez consecutiva, bajar el interés de una emisión de deuda después de que la agencia de medición de riesgos Moody's rebajara la deuda soberana española y de que Fitch y Standard & Poor's hicieran lo mismo con los principales bancos españoles.

La subasta de letras a doce y dieciocho meses se saldó con la colocación de 5.445 millones de euros (algo menos de lo previsto: 5.500 millones) con el interés marginal más bajo desde octubre de 2010. A doce meses se adjudicaron con un interés marginal del 1,949%; a dieciocho meses, al 2,395%, y a un año y medio, al 2,395%

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, calificó de «paradójica y contradictoria» la decisión de Moody's.

Grecia recibió como un mazazo la noticia de que su PIB cayó el 6,8% en 2011, tras las duras medidas de ajuste impuestas al país, y a sólo un día de la crucial reunión del Eurogrupo que evaluará si da luz verde al nuevo préstamo de al menos 130.000 millones de euros para evitar la bancarrota del país.