Uno de los objetivos del informático Jorge Sánchez es que a no muy tardar los niños quieran tener un animal mitológico como mascota. No planea un parque jurásico, sino que la empresa que dirige, Okinaki, lleva unos meses inmersa en el desarrollo de un videojuego (Mythonimals), en colaboración con el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), que usa a este tipo de personajes con la intención de estimular a los más jóvenes a hacer ejercicio o para que lleven una mejor alimentación. En el juego podrán elegir entre cuidar de seres tan diversos como un pegaso, un hipogrifo, un toro, un dragón, un gato o un ave fénix. Y serán su reflejo. "Es como una simbiosis entre ambos", afirma. Si ellos hacen ejercicio, el animal también lo hará y tendrá un buen tipo; y si son más dejados, su mascota engordará.
Aunque aún están en fase de desarrollo del juego, las críticas que están recibiendo son muy buenas. En el HUCA, asegura Sánchez, han recibido una buena receptividad. En las próximas semanas los médicos valorarán con algunos de los niños que están ingresados si realmente su juego funciona y si cumple con los efectos deseados. "El objetivo es que sirva para promover la actividad social porque necesitas contactar con gente, que promueva el ejercicio físico (hay una serie de actividades que se proponen para realizar) y la buena alimentación", señala el informático. Es este último punto, el de promover una dieta equilibrada, el que más han valorado los doctores del hospital asturiano.
El videojuego será capaz de monitorizar los movimientos del niño, y de proponerle misiones, que consistirán, entre otras cosas, en recorrer una cierta distancia caminando o corriendo. Otra labor del jugador a la hora de interactuar con su mascota es la de proporcionarle una alimentación adecuada. "Si le da a comer muchas hamburguesas y comida rápida, eso lleva al animal un deterioro físico notable y dejará de querer comer otra cosa; pero, si le da frutas o verduras, la mejoría es grande", resalta Sánchez.
En el proyecto está teniendo un papel destacado el médico especialista en rehabilitación Ricardo Llavona. Él ha sido la pieza clave para diseñar muchas de las pruebas que se proponen. Y también ha sido esencial para iniciar la colaboración de Okinaki con el HUCA. Han conseguido ser una de las compañías que participen en el llamado "Mioshuca", un programa para acercar los videojuegos a los niños hospitalizados.
Tantas esperanzas tienen en "Mythonimals" que ya tienen planes para editarlo también en videoconsolas portátiles. "Es ideal porque permiten registrar la actividad del niño, ya que tienen instalados unos sensores", apunta.
En su corta vida la empresa ha conseguido especializarse en la elaboración de videojuegos ligados con el mundo sanitario. Dos mundos, de primeras, bastantes distantes. De hecho, son unos de los aún primeros ocupantes del vivero de empresas de la Salud en La Corredoria (Oviedo). Solo tienen un par de vecinos más en el edificio. En la segunda planta del inmueble, en una de las salas comunes desde la que se ve el campo de Matalablima y parte de Colloto, Sánchez apunta esperanzado que la comercialización del juego tiene previsto que comience a realizarse a partir de septiembre. "Primero tiene que valorarlo el hospital", señala.
Aunque aún están en fase de diseño, ya tienen varios contactos hechos con algunas aseguradoras de Estados Unidos para intentar llegar a ese mercado. También con una distribuidora japonesa, la cuna de las mascotas digitales (fueron los inventores del popular "tamagotchi"), donde aseguran que la idea de la empresa asturiana ha entusiasmado.
Aunque Okinaki nació hace un par de años (en 2014), ya ha puesto en el mercado ocho juegos, y tienen otros cuatro en desarrollo. La mayoría son de temas de salud, aunque a través de su marca "Big Tree" lanzan de vez en cuando alguno "más lúdico".
Uno de sus primeros proyectos en el campo sanitario lo hicieron hace unos meses para la clínica oftalmológica Bascarán. En este caso no tenía nada que ver con los videojuegos. Era un simulador de problemas visuales. "Mediante unas gafas de realidad aumentada puedes ver como si tuvieses alguna enfermedad como glaucoma, degeneración macular, cataratas?", apunta. Sirve, por un lado, como prevención, "para que la gente se de cuenta de qué puede ocurrir si no se lleva a cabo una revisión ocular adecuada, y para que los familiares puedan ponerse en la piel del otro". Para hacerlo utilizaron una tecnología muy similar a la de un videojuego, pero con fines muy distintos.
