Las cajas de muchos comercios asturianos han notado un bajón de ingresos en los últimos días. La culpa no es del tiempo, ni siquiera de la crisis, sino de las expectativas que tienen muchos clientes de poder encontrar mañana algún "chollo" gracias a los suculentos descuentos del llamado "viernes negro" ("black friday"), una tradición importada de Estados Unidos y que ha calado hondo en el sector con anuncios de rebajas que llegan hasta el 70%. "La gente está a la expectativa, así que las ventas se han frenado estos días; la previsión para ese día es muy buena", resume Magdalena Huelga, secretaria general de la Federación Asturiana de Comercio (FAC). Es la calma que precede a la tempestad del consumo. Las asociaciones de consumidores, por su parte, llaman a estar muy vigilantes con los descuentos para no llevarse gato por liebre. En las siguientes líneas se recogen algunos de sus consejos.

La organización Facua asegura que es esencial hacerse un presupuesto para no gastar más de lo que no se tiene o evitar adquirir productos que no se necesitan. "Hay muchas veces que, aunque se estén aplicando descuentos altos, el precio sigue siendo elevado; cada uno debe, entonces, evaluar si le interesa o no comprar", aseguran desde la organización. Es decir, no hay que dejarse llevar por los impulsos.

Los sectores de la moda y la electrónica son los que más esperan incrementar sus ventas durante este "viernes negro". Manuel Fernández, presidente de la Asociación de Comercio Electrónico de Asturias (Asceas), asegura que las perspectivas de los comerciantes en esta minicampaña de rebajas son muy altas, aunque asegura que los descuentos irán por barrios. "Habrá algunos que harán un 10% y otros hasta un 40%, depende de los márgenes comerciales y las posibilidades de cada cual", resalta. Aunque, apunta también, habrá asimismo quienes no participen. Serán casos aislados. "Al final, si lo hacen los grandes nos acaban arrastrando a los pequeños también, porque si no los consumidores van a comprarles a ellos", apunta Manuel Fernández. La patronal nacional del sector textil, Acotex, acaba de divulgar un estudio que asegura que espera vender entre un 10% y un 15% más durante este "viernes negro". La Confederación Española de Consumo (CEC), por su parte, asegura que esta iniciativa es una "oportunidad para que muchos pequeños y medianos comercios mejoren sus ventas y su visibilidad". Un escaparate.

Facua explica que, por mucho que los descuentos se anuncien a bombo y platillo, puede haber letra pequeña. "Puede ocurrir que los hayan puesto sin incluir el IVA o que la rebaja sea sólo sobre el precio base", critican. Tal es la desconfianza que la organización asegura, tras una encuesta realizada a través de las redes sociales, que ocho de cada diez consumidores creen que la mayoría de los comercios oferta falsos descuentos durante ese día. El colectivo recuerda que, ante cualquier irregularidad, los derechos de los consumidores siguen estando en pie. "No varían porque sea el 'viernes negro' ", apuntan.

No obstante, esta fecha está apuntada en el calendario de muchos consumidores como el momento para adelantar las compras de los regalos de Navidad. Según un estudio desarrollado por la compañía de distribución Worten y la consultora Gfk, buena parte de los compradores de la región buscarán así evitar las subidas de precios que se suelen registrar durante los días previos a las fiestas. En su análisis, esas firmas estiman que cada asturiano se gastará 151 euros durante este "viernes negro". Se trata de una de las cantidades más bajas del país y bastante alejada de los 221 euros de la media nacional. El menú del consumo está servido.