Al grito de "Alcoa no se cierra", trabajadores de la planta de Avilés viajan en autobús para sumarse a la manifestación de esta tarde en A Coruña en contra del cierre de las plantas en Asturias y Galicia. Los desplazados han partido a primera hora de la mañana con "los ánimos en todo lo alto", como expresa uno de los trabajadores.

Ayer, más de 350 personas clamaron por la continuidad de la aluminera al grito de "Alcoa no se cierra", el mensaje de las camisetas amarillas que se convirtieron en marea en 2014, cuando la multinacional amenazó con el cierre, y que vuelven a brotar por la comarca avilesina en apoyo a los 317 trabajadores. La movilización comenzó con el cambio de turno de las dos de la tarde y se prolongó hasta las cuatro, con corte de carretera incluido. Alcaldes de la comarca, políticos de todos los partidos y líderes sindicales arroparon a una plantilla que ve como la historia se repite cuatro años después. Pero esta vez, insisten, "es diferente".

Los Gobiernos de Asturias (PSOE) y Galicia (PP) demandarán al Gobierno central un marco energético estable que garantice unos costes asumibles y competitivos para las grandes industrias electrointensivas, como condición para intentar frenar el cierre de las factorías de Alcoa en Avilés y La Coruña y como medida preventiva para disuadir una posible fuga "aún más grave" en el futuro de otras empresas muy dependientes del aprovisionamiento energético, señalaron Javier Fernández, presidente del Principado de Asturias y Alberto Núñez Feijóo, de la Xunta de Galicia.

El objetivo prioritario de las dos administraciones autonómicas y del Gobierno central es conseguir que Alcoa rectifique su decisión y continúe produciendo aluminio en Avilés y La Coruña, y, solo en caso de que no desista, se intentará buscar un comprador que garantice su continuidad, señaló la ministra de Transición Energética, Teresa Ribera. El grupo inversor europeo Klesch Group, controlado por el millonario estadounidense Gary Klesch, ya ha mostrado interés en quedarse con las dos fábricas si Alcoa las abandona.