Las salidas a Bolsa de Liberbank en 2013 y de Unicaja en 2017 depararon estructuras accionariales disímiles entre ambos grupos y esta diferencia pesará en la negociación del reparto de poder accionarial en caso de que las conversaciones prosperen.
Liberbank ya ha cumplido el artículo de la Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias que trata de conducir a las antiguas cajas de ahorro a reducir su peso en los bancos a los que hayan traspasado sus negocios financieros a menos del 30% del capital social de la entidad. Quienes no lo hayan hecho en 2024 (el plazo inicial era 2020) deberán presentar planes financieros que deberá aprobar el Banco de España. La Fundación Bancaria Unicaja controla actualmente el 49,6%, cuatro décimas por debajo del límite a partir del cual la exigencia se endurecería, con la exigencia de creación de un fondo de reserva para afrontar una eventual crisis futura del banco y al que las fundaciones deberán destinar el 30% del dividendo que perciban del banco.
Con la fusión, Unicaja podría rebajar su peso al entorno que le permita eludir los requerimientos restrictivos de la norma. La fusión con Liberbank (un banco cotizado, al igual que Unicaja) facilita el proceso porque permite conocer el precio de mercado de las entidades para negociar los futuros repartos de poder. Liberbank, que ya cumplió el objetivo del 30%, y que no precisa fusionarse (y tampoco hacer nuevas ampliaciones o vender títulos para lograrlo, opciones que tenderían a depreciar la cotización), está por ello en una cierta ventaja negociadora. La Fundación Bancaria Cajastur posee el 16,14% de Liberbank y lidera el 24,31% al sumar la representación de las de Extremadura (4,8%) y Cantabria (3,36%).
El mayor accionista individual de Liberbank es el fondo británico-maltés Oceanwood, dueño del 16,74%. Este fondo ha seguido con frecuencia estrategias a corto plazo (en el Popular apostó a su caída en Bolsa) pero en Liberbank mantuvo hasta ahora una posición a largo: aumentó su participación desde su entrada en el banco y el año pasado pidió y logró un puesto en el consejo.
Corporación Masaveu, con el 5,52%, es el segundo accionista asturiano más relevante de Liberbank tras la antigua Cajastur. Con actividades empresariales diversificadas y financieras, tiene una larga tradición de presencia en banca. Aunque hizo en el pasado alguna apuesta de corto recorrido, se ha caracterizado por lo general por la permanencia en bancos a muy largo plazo.
El empresario mexicano Enesto Tinajero (grupo Inmosán), titular del 5,52% de Liberbank, tiene inversiones en varios sectores (viñedos y vinos, financiero, clubs de fútbol y otros) y fue profesional de banca durante 20 años.
Norges Bank, que tiene el 3,26% de Liberbank, acaba de anunciar la posesión del 3,042% de Unicaja, con lo que es el sexto accionista del primero y el cuarto inversor del segundo. Se trata del gestor del fondo soberano de Noruega, el más potente de Europa. Sus posiciones son de estricta finalidad financiera y con su entrada en Unicaja ha pasado a ser accionista de todos los bancos españoles que cotizan en Bolsa.
Indumenta Pueri, segundo mayor socio en Unicaja Banco (5%), es el brazo inversor de la familia malagueña Domínguez de Gor, dueña de la empresa de confección textil Mayoral. Indumenta toma posiciones minoritarias en empresas cotizadas. Este verano lo hizo en las asturianas Duro Felguera (9,52%) y GAM (5,27).
FMR LLC, propietaria del 3,71% de Unicaja, es la empresa estadounidense Fidelity, con sede en Boston y especializada en gestión de activos y fondos de pensiones. FMR es una de las mayores gestoras por su inversión en la Bolsa española.
Santander Asset Management, que controla el 3% del banco andaluz, es una gestora de fondos de inversión y planes de pensiones del grupo bancario Santander.
