La plantilla del grupo de distribución Dia en Asturias (1.260 trabajadores) viven con inquietud las vicisitudes por las que atraviesa la compañía, tanto por la delicada situación financiera de la organización como por el reciente lanzamiento de una opa por su mayor accionista, que irrumpe en pleno proyecto de refinanciación de la deuda por la banca acreedora, supeditada a que se acometa una ampliación de capital de 600 millones.

La empresa ha hecho llamamientos tranquilizadores a los trabajadores, señalaron fuentes sindicales, con mensajes de confianza en el futuro y viabilidad del grupo, pero en medios laborales se teme que, cualquiera que sea el proyecto que se ejecute, pueda conllevar ajustes de empleo.

El consejo de Dia no se pronunció aún sobre la opa pero sí alertó ayer de desfases temporales con los compromisos asumidos con la banca para refinanciar la sociedad, por lo que "no ofrece certeza", dijo.