La industria asturiana se recuperará este año tras el retroceso sufrido en el pasado ejercicio (-0,5%), pero prolongará durante al menos otros dos años más un crecimiento inferior al promedio español, según la estimación difundida ayer por la red de predicción económica Hispalink.

La previsión de este centro de análisis apunta a que en 2020 el sector secundario regional crecerá el 1,5%, dos décimas por debajo del promedio nacional y el segundo peor comportamiento autonómico (empatado con los de Cantabria, Extremadura y Castilla y León) mientras que para 2021 se proyecta un debilitamiento, con un avance fabril del 1%, cuatro décimas inferior a la media estatal y sólo mejor que el comportamiento de Baleares, con un bajo perfil industrial.

El conjunto de la economía asturiana progresará este año, según los cálculos de Hispalink, el 1,4% (una décima más que en 2019 pero tres por debajo de lo que lo hará el conjunto de España) y el 1,5% en 2021, cuatro décimas inferior a la media nacional.

Las paradas siderúrgicas durante 2019 pesaron en el comportamiento económico regional el año pasado, y para el actual ejercicio y el próximo los economistas de Hispalink barruntan una recuperación, con la reapertura de instalaciones por ArcelorMittal en 2020, pero que perderá fuerza en el próximo.

La construcción actuará de contrapeso (este año bajará de forma sensible pero repuntará en 2021), mientras que el sector servicios será el que mostrará una evolución más estable, con crecimientos anuales en torno al 1,5%. El sector agropecuario y pesquero también mejorará este año.